“En la última hora del viernes, el Liverpool nos pidió 200 millones de euros (237 millones de dólares) por un jugador que queríamos”, señaló hoy en rueda de prensa el director de Deportes Profesionales del club, Albert Soler. “Decidimos que la inversión no es viable para no hacer el juego a esta nueva forma de entender el fútbol”.
[ÚLTIMA HORA] Munir, cedido al Alavés. Más detalles 👇 https://t.co/C47fajKz2p
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) September 1, 2017
Fue un peor final para una historia que ya comenzó mal desde que Neymar pagara el 3 de agosto los 222 millones de euros que figuraban en su cláusula de rescisión para irse al Paris Saint-Germain ante la estupefacción de los dirigentes del club español.
El Barcelona fue a por Marco Verratti, del PSG, y no lo consiguió. Luego renunció al central español Íñigo Martínez, de la Real Sociedad, no se sabe bien por qué. También echó para atrás la adquisición del centrocampista marfileño Seri, del Niza, cuando todo parecía cerrado. Y finalmente llegó lo de Coutinho. En el olvido quedaron otros muchos nombres que salieron en la prensa: Ángel Di María, Paulo Dybala, Dani Parejo, Ryad Mahrez, Thomas Lemar y más.
Todos estos movimientos fueron contados día a día por la prensa en base a filtraciones del club, que fue de todo menos discreto con sus movimientos. Y más cuando todos los equipos sabían que disponía de los 222 millones que dejó Neymar. La inflación ya fue imparable.
“El hecho de que el PSG viniera con 220 millones provocó que todo el mundo supiera que teníamos dinero. Y cuando vas así al mercado las peticiones son desorbitadas, nos hemos encontrado con situaciones inverosímiles”, lamentó hoy Soler.
🎥 @Dembouz se pone a prueba 👇 https://t.co/2OXfow7rve
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) September 1, 2017
El Barcelona cerró el mercado de fichajes con cuatro contrataciones: el extremo Gerard Deulofeu (12 millones de euros), el lateral portugués Semedo (30 millones), el centrocampista brasileño Paulinho (40 millones) y el extremo francés Ousmane Dembélé (105 millones más 40 en variables).
Ésta última fue la única incorporación que logró ilusionar mínimamente a la hinchada azulgrana, aunque el precio pagado -el segundo fichaje más caro de la historia del fútbol tras Neymar- fue puesto en cuestión. Dembélé tiene 20 años y apenas jugó 50 partidos en la elite con el Borussia Dortmund para marcar 10 goles.
La afición en contra
Durante este tiempo, y con una moción de censura en marcha, el presidente del club, Josep María Bartomeu, tuvo que escuchar gritos de “dimisión” precisamente durante la presentación de Dembélé y leyó en la prensa enormes críticas a su gestión deportiva.
La última fue la de Xavi Hernández, ex futbolista del mejor Barcelona de la historia, quien en una entrevista a “Marca” publicada el viernes declaró: “(El club) Podría haber fichado mejor. Se ha dormido porque hace cinco o seis años tenía a los mejores futbolistas del mundo para el sistema del Barça”.
⚽️ Paulinho, goleador con el Brasil https://t.co/Dmj8GPwAjD
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) September 1, 2017
Existe un consenso generalizado de que el club lo dejó todo para el final y el resultado fue frustrante, como insinuó Xavi. El intento casi desesperado por Coutinho reflejó que la directiva tiene dudas sobre si el equipo está preparado para competir por todos los títulos con lo que hay en estos momentos. Y más después de lo visto en la Supercopa de España, donde el Real Madrid lo derrotó por un global 5-1 entre los dos encuentros, en los que el equipo blanco demostró una manifiesta superioridad.
El Club hace las siguientes consideraciones respecto a la solicitud de voto de censura https://t.co/WrG00xtrrR
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) September 1, 2017
Y otro detalle: el Barcelona también quiso a los futbolistas españoles Dani Ceballos y Theo Hernández y ambos eligieron jugar en el Real Madrid.
Sólo el tiempo dirá si Dembélé es suficiente jugador para hacer olvidar a Neymar o si Paulinho y Semedo son más que futbolistas de complemento. Y, sobre todo, la estabilidad del Barcelona dependerá de los resultados. Y hablar de la estabilidad del club es hablar de la estabilidad de Bartomeu.