No se ha especificado el tiempo que Drogba estará fuera de acción, pero será una baja lamentable para el Montreal, que se alista para el arranque de la temporada 2016 de la MLS el próximo domingo, cuando visite al Vancouver Whitecaps, el otro club canadiense en la la liga americana de fútbol (soccer) profesional.
El exinternacional marfileño dijo resentirse la rodilla cada vez que juega en canchas sintéticas, como las del Montreal.
El miércoles, Drogba solicitó a la dirección del club que se le permita jugar el primer mes de temporada MLS con el Miami FC de la North American Soccer League (NASL), que juega en pasto natural.
Esta lesión de menisco le apareció a Drogba cuando todavía era parte del equipo de Chelsea antes de su llegada a la MLS en julio de 2015.
“Tuve una cirugía antes de venir aquí, con un menisco limpio”, dijo Drogba, quien achaca su malestar al césped artificial.
Indicó no poder permitirse el riesgo de agravamiento de la lesión porque “hay más retos, más adelante en la temporada”.
De los primeros cinco partidos del Impact, cuatro son en campos de césped artificial: ante el Vancouver Whitecaps, el New York Red Bulls, el Seattle Sounders y el Columbus Crew.
El excapitán de Costa de Marfil anotó 11 goles para llevar al Impact a la mejor temporada de su historia al alcanzar las semifinales de la Conferencia, el equivalente a los cuartos de final.
Drogba, que cumple 38 años el 11 de marzo, fue abordado durante la temporada baja para unirse al entrenador del Chelsea, el club donde jugó desde 2004 hasta 2012 y luego en 2014 hasta 2015, y con el que ganó cuatro títulos del Camponato inglés y la Champions League.
“Muchas cosas se han dicho (…) eso es parte del fútbol, pero desde ahora estoy aquí y estaré aquí al 200%. Si yo quería estar en el Chelsea, estaría en el Chelsea”, añadió el exjugador del Marsella.