Cristiano salió con aparentes dolores musculares en los isquiotibiales de su pierna derecha. El jugador portugués había jugado hasta ahora todos los minutos de la Liga y salió del césped del estadio Santiago Bernabéu visiblemente contrariado.
Sin saludar a nadie y ante la cara de asombró de Zinedine Zidane, no se paró ante ningún compañero ni miembro del cuerpo técnico y se metió en el túnel de vestuarios directamente.
A la espera de noticias, una posible baja de Cristiano Ronaldo, que lleva 31 goles en Liga y 16 en Liga de Campeones, podría ser muy importante para su equipo en el último tramo de la temporada.