Todos ellos comparecieron ante el titular del Juzgado de Instrucción número dos de Pamplona, Fermín Otamendi, que investiga el presunto desvío irregular de al menos 2.4 millones de euros de las cuentas de Osasuna y el supuesto amaño de partidos del equipo navarro durante las pasadas temporadas.
Los primeros en comparecer en el Palacio de Justicia, poco antes de las nueve de la mañana, han sido Jordi Figueras, Jorge Molina y Antonio Amaya, quien ha acudido con su hermano Iván, pero éste, también futbolista, ha acudido como acompañante.
Después de las nueve y media de la mañana (hora de España) llegaron al Palacio de Justicia Sergio García y cinco minutos antes de las diez de la mañana Puñal, todos ellos acompañados por sus abogados.
A las 10.36 horas salieron del juzgado Jordi Figueras y Antonio Amaya, acompañado por su hermano Iván. Ninguno de ellos ni sus abogados realizaron declaración alguna.
Solo cuatro minutos después abandonó el juzgado Sergio García, cuyo abogado señaló que el futbolista del Espanyol se acogió a su derecho a no declarar y que emitirá un comunicado público.
A las 11.15 horas salió Puñal, quien atendió a los medios de comunicación e indicó que respondió a las preguntas de juez, mientras que cinco minutos más tarde abandonó el Palacio de Justicia Jorge Molina, capitán del Betis, sin realizar declaraciones ni siquiera indicar si había declarado o no.
Poco antes de la toma de declaraciones se ha personado en el Palacio de Justicia el abogado de la LFP en esta causa, Manuel Quintanar, quien no tiene acceso a las declaraciones y afirmó a la agencia de noticias EFE que acudió a Pamplona para hablar con la fiscalía.
La confesión del exgerente de Osasuna Ángel Vizcay ante la Liga de Fútbol Profesional el pasado 26 de enero implica a Puñal y Sergio García en un supuesto arreglo del resultado del partido Espanyol-Osasuna de la penúltima jornada de la pasada temporada, así como al exosasunista Damià Abella, esta temporada en el Middlesbrough inglés, quien no compareció hoy.
Vizcay implica a Jordi Figueras y Antonio Amaya en un presunto arreglo de los dos últimos encuentros del Betis la pasada temporada, por primar al conjunto bético para ganar al Valladolid en la penúltima jornada y por dejarse ganar en la última frente a Osasuna en El Sadar.
La trama de presuntos amaños, junto con el supuesto desvío irregular de dinero de la cuentas de Osasuna, de al menos 2,4 millones de euros, la investiga el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona tras la denuncia puesta por el club navarro y la querella de la Liga de Futbol Profesional (LFP).
Tras la imputación de estos cinco futbolistas (Jordi Figueras, Jorge Molina, Antonio Amaya, Sergio García y el ya retirado Patxi Puñal) el número de imputados en la causa asciende a 17 personas, entre ellas el exdirectivo de Osasuna Txuma Peralta, el único en prisión desde el pasado sábado último e imputado por hasta cinco delitos, incluido el de amaño de partidos de futbol.
