Pese a ganar dos títulos de liga, el segundo ciclo de Russo en Boca estuvo atravesado por la pandemia del coronavirus y se agotó con una debacle en los últimos dos meses, bajo el signo de los malos resultados.
“Amo los colores. He defendido la camiseta dentro de lo mejor posible y hoy me toca desde otro lado, intentando poner al club en lo más alto”, dijo el sucesor.
Los auriazules ganaron un solo partido de 16 encuentros entre todas las competencias, mientras en el Torneo de la Liga argentina apenas sumó 4 puntos sobre 18 posibles y se hunde en el fondo de la tabla con solo 2 goles anotados.
La apuesta para salvar el año es Battaglia, de 40 años. Hizo toda su carrera como jugador boquense (1998-2013), salvo un breve paso por el Villarreal de España (2004-2005). Hasta ahora era colaborador del cuerpo técnico.
Mediocampista defensivo, es el jugador que más títulos conquistó en la historia ‘xeneize’, con cuatro Copa Libertadores (2000, 2001, 2003, 2007), dos Intercontinentales (200, 2003), una Sudamericana (2004), tres Recopas Sudamericanas (2005,2006 y 2008) y una Copa Argentina (2012), además de siete títulos en torneos locales.
Luego de reunirse con el Consejo del Fútbol de Boca, el ahora exdirector técnico se despidió del plantel antes de retirarse del club sin hacer declaraciones.
Battaglia, sin pergaminos como entrenador más allá de conducir las inferiores del club, quedó a cargo hasta diciembre y este mismo martes dirigió el entrenamiento del plantel profesional.
💫 Seba Battaglia, día 1. #VamosBoca 🟦🟨🟦 pic.twitter.com/FV8jkEYCFm
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Russo deja así al único club argentino que nunca descendió a segunda división, con el peor arranque en un campeonato desde el Metropolitano-1984 y en un inusual 24º puesto entre 26 equipos.
En ese lapso, Boca sufrió la eliminación en octavos de final de la Copa Libertadores en una escandalosa serie con el Atlético Mineiro en la que el equipo argentino se consideró perjudicado por gruesos errores del VAR.
El haber eliminado a su archirrival River Plate de la Copa Argentina –en serie de penales (4-1) tras un empate en cero– fue un escaso consuelo para los hinchas cada vez más inquietos por la falta de juego y goles del vigente campeón argentino.
🆕 Primer día de trabajo de @sebabattaglia5 como entrenador del plantel profesional.#VamosBoca 🟦🟨🟦 pic.twitter.com/YFmNT5eYY1
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Russo, de 65 años, había llegado el 1 de enero de 2020 de la mano del dirigente e ídolo Juan Román Riquelme, a cargo del fútbol de Boca.
En su primera etapa como DT en 2007 y con un deslumbrante Riquelme en el campo de juego, Russo había alzado la Copa Libertadores, la sexta y última de Boca. Pero 14 años después los resultados fueron muy distintos y el mismo Riquelme le dijo adiós.
De todos modos “su nombre permanecerá para siempre en la historia grande xeneize”, destacó el comunicado que confirmó oficialmente el despido de Russo.
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La salida del DT quedó sentenciada la noche del domingo tras la derrota por 1-0 frente a Estudiantes de La Plata.
La Copa Argentina es ahora el último recurso que le queda para conseguir un boleto a la Copa Libertadores-2022, un título que se volvió una obsesión para los xeneizes.
“Tal vez (Russo) perdió el rumbo, pero no sólo él. Todos tienen que hacer su autocrítica y achicar el margen de error para salir adelante”, afirmó el exfutbolista ‘xeneize’ Jorge Ribolzi a TyCSports.
Sin el aliento del público en la Bombonera por el covid-19, Boca vio partir a su ídolo Carlos Tevez. El el 4 de junio, el goleador le puso punto final a su carrera en el club de sus amores. Fue la partida más notoria pero no la única.
En un recambio profundo, se fueron Esteban Andrada, Ramón Abila, Mauro Zárate, Franco Soldano, Julio Buffarini, Emmanuel Mas, Leonardo Jara y Guillermo Paul Fernández, sangría compensada con pocas incorporaciones como la del peruano Luis Advíncula.
Tampoco los colombianos de Boca pasan un buen momento. Sebastián Villa ya no quiere vestir la camiseta auriazul. Jorman Campuzano expresó su deseo de irse. Frank Fabra tiene bajo rendimiento y Edwin Cardona, cuyo préstamo vence en diciembre, demoró su regreso tras jugar la Copa América en una actitud que molestó al mundo ‘xeneize’.