Aunque oficialmente el club despidió al entrenador por falta grave, lo que le exoneraría del cobro de toda indemnización, los letrados del “Loco” esgrimen un contrato firmado entre el técnico y Lopez en febrero de 2017, meses antes de su llegada oficial al club.
En él, que no fue presentado en las instancias deportivas francesas, hay una cláusula que asegura que Bielsa cobrará “todas las cantidades previstas” en el contrato durante “la duración total del mismo” sea cual sea el motivo de la rotura del contrato.
El club se basa en el contrato firmado a la llegada del entrenador al club, el que fue depositado ante la Liga de Futbol Profesional (LFP) que no contiene esa cláusula, por lo que sostienen que no deben indemnizarle si se prueba que cometió una falta grave.
El tribunal de comercio puede decidir el pago de las cantidades exigidas por el entrenador lo que le llevaría a nombrar un administrador judicial para sanear el club.
La entidad estaría entonces en una situación delicada, que se sumaría a su mal momento deportivo, a dos puntos del descenso y con un calendario complicado, puesto que en las siete próximas jornadas se medirá con seis de los siete primeros de la tabla.
Además, desde el pasado 12 de diciembre pasado tiene prohibido hacer fichajes por el desequilibrio de sus cuentas.