El rival -decimotercer clasificado- y el escenario -el Camp Nou- parecen propicios para que el grupo dirigido por Ernesto Valverde confirme con otro registro histórico el excelente estreno del entrenador español en el banco del Barcelona.
A su mando, los azulgrana encadenaron 23 victorias y siete empates en lo que va de Liga que, sumados a los siete triunfos consecutivos con los que concluyó la pasada campaña el equipo dirigido por Luis Enrique, colocan a tiro el récord de la Real Sociedad.
Para encontrar la última derrota del Barcelona en Liga hay que remontarse al 8 de abril de 2017, cuando los catalanes cayeron en La Rosaleda ante el Málaga y, prácticamente, dijeron adiós al título.
El de la presente campaña quedaría prácticamente sentenciado en favor de los catalanes, si los hombres de Valverde suman un nuevo triunfo mañana ante el Leganés.
Lee también: Cristiano se quita una espina y sorprende al mundo
A ocho jornadas para que la Liga eche el cierre, el Barcelona lidera el campeonato con nueve puntos de ventaja sobre el Atlético de Madrid, que el domingo visitará al Real Madrid en el derby de la capital española.
Independientemente de lo que acontezca en el choque estrella de la jornada, los azulgrana tienen prisa por cerrar un campeonato que dominan con holgura desde hace meses.
No siempre acompañado del buen juego que su hinchada le exige y hasta decepcionando con partidos tan pobres como los dos últimos ante el Sevilla (2-2) y la Roma (4-1 para los catalanes), Valverde ha logrado armar el Barcelona más fiable de los últimos años: líder en la Liga, finalista de la Copa del Rey y a punto de clasificarse para las semifinales de la Liga de Campeones europea tras dos años consecutivos sin alcanzar esa instancia.
El preparador español ha dotado de solidez defensiva -apenas 25 goles recibidos en todas las competiciones- a un equipo que, ofensivamente, sigue viviendo de la genialidad del argentino Lionel Messi y del equilibrio que Sergio Busquets y Andrés Iniesta dan en el mediocampo.
Aun así, el entrenador azulgrana mantiene la prudencia, también ante un Leganés que no vence fuera de casa desde el pasado mes de octubre, cuando derrotó al colista Málaga.
Lee también: Zlatan baja de las nubes a Cristiano Ronaldo por su chilena
El choque, en cualquier caso, parece destinado a que Valverde haga rotaciones y dé descanso a sus hombres más exigidos, el aún tocado Busquets y Messi, entre ellos.
Con la vuelta de los cuartos de final de la Champions ante la Roma el próximo martes, el astro argentino podría aprovechar para acabar de reponerse de sus molestias en los isquiotibiales.
“Ahora mismo, esté Messi o no, todos los futbolistas van a estar muy enchufados, pero creo que rotarán”, señaló hoy Asier Garitano, entrenador del Leganés.
También se prevén rotaciones en el otro gran choque del sábado, el que enfrentará a Celta y Sevilla en Balaídos. Tras caer por 2-1 ante el Bayern de Múnich en la ida de los cuartos de final de la Champions, los andaluces necesitan reservar las máximas fuerzas posibles para intentar la remontada el miércoles en el Allianz Arena.
“No me gusta cambiar mucho el equipo, pero seguramente algún cambio haré, aunque no muchos”, afirmó, no obstante, Vincenzo Montella.
“El partido de mañana es el más importante para la Liga; tenemos que entrar en Europa el próximo año y es como una final”, añadió hoy el entrenador del Sevilla.
“El sábado próximo también será una final contra el Villarreal. Y entre ellos, tenemos un partido para la gloria contra el Bayern, pero de eso hablaremos el domingo”, concluyó el italiano.
La jornada del sábado de la Liga se abrirá con el choque entre el Alavés y el Getafe y también vivirá el duelo entre el Betis y el Eibar, con los andaluces peleando con su rival ciudadano por entrar en la próxima Liga Europa.
Contenido Relacionado
> ¡Escándalo en el West Ham! hinchas invaden el campo y confrontan a sus jugadores
> Y se concretó el “triplete”: Messi y Antonela dan la bienvenida a Ciro, su tercer hijo