Igual que los cuatro hombres que alinea Löw en ataque en su once de salida, ya sea con el habitual 4-2-3-1 o con el 3-3-3-1 que prueba a veces.
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— Die Mannschaft (@DFB_Team) June 28, 2016
Desde el inicio de la competición es la parte del equipo que más modificaciones ha sufrido.
Empezó con Mario Götze en punto, apoyado por Thomas Müller, Mesut Özil y Julian Draxler en los dos primeros partidos, con un resultado decepcionante.
Con un gol, el tercero, y una asistencia para el tanto de Mario Gomez, Draxler fue elegido el mejor del partido ante los eslovacos, el domingo en Lille.
Hasta entonces sólo había jugado en un gran torneo el cuarto de hora final ante Brasil (7-1), cuando el marcador era ya de 6-0. En su 22º partido internacional, el jugador de 22 años aprovechó perfectamente la oportunidad.
“Julian estuvo muy bien. Le dije que asumiera riesgos, que intentara regates”, reveló Löw el domingo.
Con Özil como jefe de orquesta, el imprevisible Müller, Gomer y Draxler, Alemania parece haber encontrado un cuarteto que se complementa tan bien como Atos, Porthos, Aramis y D'Artagnan en la célebre novela de capa y espada.
Götze ni siquiera entró en juego durante el partido ante Eslovaquia.
“Creo que he dado buenos argumentos hoy”, comentó Draxler después del partido de Lille. Su primer partido como internacional fue cuando tenía 18 años y por ahora es una de las revelaciones de la Eurocopa.
El caso Gotze
“¿Qué vamos a hacer ahora con Götze?”, se preguntaba el semanario Sport Bild en su página de internet.
La comparación entre los dos jugadores, con un tiempo de juego casi idéntico -222 minutos para Draxler, 210 para Götze-, se decanta claramente del lado del primero, con un gol y una asistencia contra cero para el bávaro. Y sobre todo con tasas de regates del 71% y 38%.
Götze está en la historia de la Mannschaft para siempre como autor del gol que dio el título ante Argentina en el Mundial de Brasil-2014. Löw siguió confiando en él para esta Eurocopa, pese a una temporada decepcionante con el Bayern de Múnich, marcada por una larga baja por una lesión en los aductores.
Ante Italia, parece poco probable que Löw decida apostar por él de entrada, viendo lo bien que funcionó la apuesta sin su presencia en los octavos de final.
Un duelo ante la Azzurra que se presta a pocos experimentos, sobre todo por la solidez mostrada por los italianos, verdugos el lunes en octavos de la campeona España (2-0).
Alemania necesita a sus mosqueteros con los floretes bien afilados.