La pareja nacional retornó la noche del miércoles al país y juntos presumieron el metal dorado, logrado en una prueba exigente.
Abascal —tripulante y Hess —capitán— se complementan de manera perfecta y juntos guían el barco que los ha llevado a conquistar grandes triunfos para Guatemala.
Irene Abascal y Jason Hess compiten en Hobie Cat 16, desde hace dos años.
Su primera participación como equipo guatemalteco fue en la Copa Cummins, México, 2013, en la que finalizaron primeros.
En el Mundial de Australia, celebrado en febrero del 2014, obtuvieron el cuarto lugar.
Fueron primeros en Delaware 2014, donde se clasificaron a Toronto 2015.
En Veracruz 2014 obtuvieron la medalla de bronce.
Lo más reciente es la medalla de oro que ganaron en los Panamericanos de Toronto 2015.
El próximo reto será en septiembre en el Norteamericano de Hobie Cat, en Texas.
“Irene y yo nos hemos sacrificado mucho. Dejamos de hacer muchas cosas en nuestras vidas para poder vivir esta pasión”, aseguró Hess.
Añadió que la vela es su vida, pero que no es fácil.
“Esto es un viaje que requiere de mucho apoyo. Hemos tenido buenos sentones, pero la gente que está a nuestro alrededor es la que nos levanta la frente y nos motiva a seguir adelante”, señaló.
Abascal, por su parte, expresó que el oro conquistado la llena de satisfacción.
“Fue una experiencia increíble. Hubo momentos complicados y la verdad no me esperaba competir en unos panamericanos y llegar a ganar oro”, aseguró Irene.
Agregó que su función como tripulante conlleva una gran responsabilidad. “Debo mantener que el barco vaya plano y con velocidad. También controlo una de las velas”, explicó Abascal, quien al igual que Hess, sueña en competir en unos Juegos Olímpicos.