Arévalo y Caal buscaban mejorar sus tiempos, pero el clima frío hizo que los dos fondistas tuvieran problemas para encontrar el ritmo adecuado y mantenerse en el grupo de pelea.
En el kilómetro 16, ambos corredores se mantuvieron en el tercer grupo que se había formado, pero más adelante Caal no aguantó el paso y se quedó atrás, lo que hizo que el originario de Uspantán, El Quiché, batallará solo con los demás corredores.
A pesar del fuerte viento, Arévalo no se desesperó y mantuvo el objetivo de mejorar la marca, pero le fue imposible, al llegar a la meta registró 2.20.52, mientras que Caal hizo un crono de 2.32.51.
La carrera fue ganada por el keniata Lucas Rotich, con un tiempo de 2.07.17, y en la rama femenina la etíope Meseret Hailu, con un registro de 2.25.41 fue la vencedora.
Apoyo multitudinario
Cientos de personas no dejaron pasar la oportunidad para apoyar a los corredores de diferentes países, que lucharon contra el clima para poder terminar la prueba.
Desde tempranas horas, los corredores se dieron cita a la calle Karolinenstraße, que fue testigo de como los participantes se mostraron alegres durante al banderazo de salida.
En el paso de los corredores de África, el público les aplaudió al ver el ritmo acelerado de competencia que impusieron desde el inicio.