Hansen es de la colonia El Limón, zona 18, y llegó a la Fundación hace mes y medio, en búsqueda de una oportundiad para ser parte del deporte. Su especialidad es el taekuondo y junto a un grupo de 20 atletas, hicieron pruebas de salto de longitud, resistencia y agilidad.
“Ellos son jóvenes guerreros, a los cuales les gusta hacer deporte, se divierten y dan lo mejor de ellos en cada entreno.Quieren superarse y ser mejores cada día y trabajan para lograrl,o a pesar de sus dificultades, como lo que observamos hoy”, dijo Byron Acajabón, entrenador de taekuondo.
Fue durante el salto de longitud que su calzado quedó inservible, pero esto no lo desanimó. Se quitó los tenis y continuó con determinación y sin zapatos.
Admiración
Ya para la prueba de velocidad, Hansen se quitó los tenis rotos y en calcetines comenzó a correr, mientras todos sus compañeros lo observaban con admiración. Gritaban: “¡Va a ganar, y descalzo!”. Al concluir la prueba el taekuondista recibió la admiración de todos los presentes.
“La misión de este proyecto es contribuir a la transformación de niños y jóvenes que viven en zonas de riesgo en Guatemala a través de la educación de los Principios, Valores olímpicos y la práctica deportiva como herramienta para la prevención de la violencia y la delincuencia”, aseguró María José Paiz, Directora Ejecutiva de Funog.
