Los problemas entre los dos equipos de la Liga Nacional dieron inicio en junio de 2019 cuando Municipal, en sus redes sociales, oficializó la contratación del volante mixto. Pronto, Guastatoya reaccionó y aseveró que esto no podía ocurrir porque Barrientos tenía contrato vigente con ellos. De hecho, algunos de los directivos aseveraron que “no era la primera vez que los Rojos le robaban un jugador a Guastatoya”.
La demanda, que consta de 241 hojas, y es el expediente TAD No. 55-2020, la presentó el presidente de la junta directiva y representante legal de Guastatoya, Leonardo Moscoso Vásquez ante la Federación Nacional de Fútbol que ya la admitió para su trámite este 4 de noviembre.
Municipal, que hasta el momento no se ha pronunciado al respecto, tiene cinco días hábiles, a partir de que les notifiquen, para que se pronuncien en relación con este demanda.
“Bajo el apercibimiento que de no hacerlo se tendrá por cotestada en sentido negativo, se continuará con el proceso en su rebeldía declarada de oficio por el Tribunal de Arbitraje de la Federación Nacional de Futbol”.
Barrientos firmó en 2019 por un año con los escarlatas y se convirtió en aquella oportunidad en el quinto refuerzo del equipo rojo a la espera.