“Fue un momento de incredulidad y difícil de superar. Aunque algunas personas piensan a veces que no tengo sentimientos, sí los tengo, pero tuve que dejarlo a un lado inmediatamente, porque debía enfocarme en los 50 kilómetros”, afirmó el atleta de 23 años.
El 23 de noviembre Érick encabezaba la prueba de los 20 kilómetros de marcha en la Avenida Salvador Díaz Mirón, y cuando restaban 30 metros para colgarse la presea de oro, fue descalificado y el mexicano Horacio Navas se quedó con la corona.
Siete días después, Barrondo hizo sonar el himno de Guatemala en suelo veracruzano, tras conquistar la distancia de 50 kilómetros. Y para el marchista de San Cristóbal Verapaz fue más que una revancha, un obsequio para todos los guatemaltecos, en especial para los migrantes.
“Necesite varios días para recuperarme de la desilusión y me enfoqué en lo que venía. Porque esto es así, no me puedo quedar atrapado en el pasado. Y también porque quería mucho dedicarle este triunfo a todos los migrantes, porque son personas luchadoras que sufren y se esfuerzan. Les envío mi cariño”, dijo el medallista olímpico en Londres 2012.
El 2014 fue un año productivo para el marchista guatemalteco, quien se consagró en La Coruña, Polonia, Eslovaquia y Lituania, además del récord en los 50 kilómetros en Veracruz, e imponer también un récord nacional en los 20 mil metros, con el recinto Mateo Flores como escenario.
“Considero que este año ha sido el más exitoso para mí. A pesar de que en el 2012 gané la plata en Londres. Ahora solo tengo pendiente un regalo para Guatemala, y es ganar una medalla en el Mundial”, mencionó Érick.
Por lo que el próximo año tiene un atractivo panorama para el marchista, pues sus máximos eventos serán el Mundial de Marcha en China, en donde su único objetivo es subir al podio, además de los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, en donde buscará revalidar la medalla de oro conseguida en Guadalajara 2011.
