A pesar de que la UFC es uno de los torneos más violentos, las críticas han llovido sobre el árbitro ya que no cuidó la integridad física de las contendientes, al no detener a tiempo la salvaje golpiza de Shevchenko a Cachoeira.
La situación pudo haber terminado en tragedia, pero Shevchenko ganó por sumisión y Cachoeira fue atendida de inmediato por los paramédicos que se encontraban en el recinto deportivo.
Al finalizar se contabilizaron 230 golpes para la ganadora contra 3 de la brasileña.
El presidente de la UFC, Dana White se mostró indignado con la actuación de Yamasaki. “Lamentablemente el árbitro está ahí para protegerte y Mario no lo hizo. Esta no es su primera actuación repugnante en el octógono” señaló el empresario que le exigió al árbitro hacer mejor su trabajo.