Aun así, Pacquiao dominó los últimos asaltos y el resultado podría haberse inclinado a su favor.
El veterano entrenador de Pacquiao Freddie Roach predijo que la pelea sería corta y dulce, pero Horn -invicto en sus 17 combates profesionales previos- presionó al ganar algunos de los primeros asaltos y Pacquiao necesitó atención médica en los asaltos sexto y séptimo por un corte en la parte superior de la cabeza producido en un choque de cabezas.
Los jueces dieron puntajes de 117-111, 115-113 y 115-113. Nada más terminar la pelea, Horn hizo una llamada a Floyd Mayweather Jr. y dijo no ser “ninguna broma”.
Roach había dicho esta semana que pensaría en recomendar a Pacquiao que se retirase si perdía el combate, pero que eso dependería de cómo peleara.
El equipo del púgil filipino había hablado de una revancha con Mayweather si vencía a Horn, confiando en vengar su derrota por puntos en el gran combate de 2015. Ahora, eso se ve como una remota posibilidad.
Pacquiao, que llegó al combate con un registro de 59-6-2 y 38 nocauts, defendía el título de la OMB que ganó por puntos el pasado noviembre ante Jessie Vargas.