A diferencia de la decepcionante etapa del miércoles, la que acabó en Cauterets, todos los rivales de Froome le atacaron en el duro ascenso final, aunque el británico pudo contar, como siempre hasta ahora, con el trabajo extraordinario del australiano Richie Porte primero y del galés Geraint Thomas después para no ceder tiempo ane sus adversarios.
“Hemos probado al líder y ha respondido muy bien, sobre todo con su equipo, pero seguiremos intentándolo”, declaró el colombiano Nairo Quintana, tercero en la general al 3’09” de Froome.
Por delante del grupo de los favoritos, ‘Purito’ Rodríguez, que se había metido en la escapada buena del día (formada por una veintena de corredores), demostró en el Plateau de Beille que era el mejor escalador de todos los fugados y se impuso en solitario.
El veterano líder del Katusha, de 36 años, logra así su segunda victoria de etapa en esta edición de la Grande Boucle, tras la lograda en el Muro de Huy en la tercera jornada.
El escalador catalán admitió que lo pasó mal en las dos primera jornadas pirenaicas, en las que perdió mucho tiempo, pero que ahora, tras olvidarse de la general, buscará otro triunfo parcial: “Por ejemplo la etapa de Mende (sábado), aunque seguramente será más difícil que hoy entrar en la fuga buena, y queda toda la próxima semana en los Alpes para ir a buscar una tercera victoria de etapa”.
Fuga cantada
Estaba cantado que muchos corredores, mal clasificados en la general, tratarían de entrar en una fuga con la esperanza de que el equipo Sky no trabajase por buscar la victoria de etapa.
Tras el primer esprint intermedio (km 20), comenzó a formarse la etapa buena del día después de un ataque del belga Lieuwe Westra (Astana). El grupo de escapados lo formaron finalmente 22 corredores, entre los que estaban algún nombre destacado como el español Joaquím ‘Purito’ Rodríguez (Katusha), ganador en el Muro de Huy, y el campeón del mundo, el polaco Michal Kwiatkowski (Etixx).
El Sky se limitó a imponer un ritmo constante al pelotón principal y las diferencias fueron creciendo rápidamente a favor del grupo de fugados, que se partió en el ascenso al Col de la Core, donde empezó a llover.
El belga Sep Vanmarcke (Lotto-Jumbo) y Kwiatkowski, tras escaparse en el puerto anterior, comenzaron el ascenso final al Plateau de Beille con 1’45” sobre el grupo de ‘Purito’ y más de 10 minutos al pelotón principal.
Purito se escapa en subida final
Pero el escalador español se lanzó a la caza del polaco, al que alcanzó a falta de 7,5 km para el final y se marchó en solitario a la meta.
Por detrás, como siempre, Porte y Thomas tiraban del selecto grupo de los favoritos, con Quintana, Contador, Valverde y Nibali entre otros.
Contador, pese a que reconoció tras la etapa que no está “con el punto de forma” que le gustaría, fue el primero en atacar a los hombres del Sky, a poco más de 6 km, y después lo hizo Nibali cuando el doble ganador del Tour fue cazado por el equipo del líder.
Con el campeón de Italia con unos metros por delante, el turno fue para Valverde, que lo intentó dos veces a falta de 5 km, hasta que lo probó su compañero en Movistar, Nairo Quintana a falta de 3,5 km.
Ese ataque del colombiano provocó que Froome se quedara sin Porte, pero aún le quedaba Thomas para trabajar para él y cazar a Quintana pocos metros más arriba.
A falta de dos km atacó Froome, contraatacó Valverde y Quintana volvió a dar un hachazo, si que ninguno de los favoritos cediese y entrasen todos juntos.
Sin diferencias entre los favoritos
El británico no pudo sino agradecer el trabajo de sus compañeros. “Que tus compañeros tiren (del pelotón) desde el principio y que alguien como Geraint Thomas me lleve hasta la meta como lo ha hecho es un escenario ideal.”
Tras la tercera y última jornada en los Pirineos, y a la espera del desenlace de la carrera en los Alpes la próxima semana, Froome mantiene su ventaja sobre sus principales rivales: 2’52” al estadounidense Tejay Van Garderen, segundo, y 3’09” sobre el colombiano Nairo Quintana, en lo que sería por el momento el podio en París.
El español Alejandro Valverde es cuarto a 3’58” y su compatriota Alberto Contador sexto a 4’04“, mientras que Nibali está algo más distanciado, noveno a 7’47.”
Cierto es que Froome sale reforzado de los Pirineos, pero la batalla de este jueves augura jornadas muy intensas en los Alpes. “Si me mantengo en este nivel creo que se pueden hacer cosas buenas” en esas cuatro etapas alpinas de la próxima semana, aventuró Quintana.