Ahora los monoplazas rojos deberán corroborar sus progresos en Shanghai para comenzar a hablar de un posible rival de Mercedes, cuando todavía quedan 16 carreras por disputar.
“Tuvimos un fin de semana difícil en Malasia”, resumió Lewis Hamilton, el vigente campeón mundial, argumentando que hizo mucho calor y que tuvo problemas con su Mercedes el viernes.
“Nada ocurrió como habíamos previsto”, añadió sobre su rendimiento en la carrera de hace dos semanas.
Más tarde la escudería alemana analizó lo sucedido y el campeón británico dijo que no tenía nada que lamentar sobre el Gran Premio de Malasia.
Ahora llega a China, un circuito en el que ha subido a lo más alto del podio en tres ocasiones; en 2008 y 2011 con McLaren y el año pasado con una Flecha de Plata.
“Es un desafío diferente, con respecto al de Albert Park (Melbourne) y Sepang (Malasia), pero lo aprecio mucho y se adapta bastante bien a mi estilo de pilotaje. Sólo he faltado dos veces al podio”, añadió Hamilton sobre sus ocho participaciones en Shanghai.
En las 11 ediciones disputadas desde 2004 el palmarés lo dominan pilotos que han sido campeones del mundo. Sólo el brasileño Rubens Barrichello (2004) y el alemán Nico Rosberg (2012) se escapan a la norma.
“Es aquí donde logré mi primera pole position y gané mi primera carrera”, recuerda Rosberg, subcampeón mundial y que este año sueña con destronar a su compañero en Mercedes Hamilton.
Raikkonen también ganó en China
“Nuestros rivales han aumentado su nivel, por lo que ahora somos nosotros los que tenemos que poner la barrera más alta”, señaló Toto Wolff, director de Mercedes, sobre la mejoría de Ferrari.
La temperatura, normalmente inferior en China con respecto a Malasia, debería ser un punto a favor de las Flechas de Plata.
Pirelli, el fabricante italiano encargado de suministrar los neumáticos, ha recordado que el clima en Shanghai, bajo la nube de polución que recubre la ciudad, puede ser sorprendente.
Lewis Hamilton lidera la clasificación del Mundial con tres puntos de ventaja sobre Sebastian Vettel antes de la disputa del Gran Premio de China.
Entre los candidatos al podio no hay que olvidar al finlandés Kimi Raikkonen. El veterano piloto, campeón del mundo en 2007 con Ferrari, protagonizó en Malasia una espectacular remontada desde el último puesto al cuarto y, como Hamilton y Vettel, ya sabe lo que es ganar en Shanghai.
Detrás de Mercedes y Ferrari, Williams espera disfrutar en China de las cualidades aerodinámicas del nuevo FW37, además de la potencia de los motores Mercedes.
“Se parece a Barcelona, donde completamos la gran parte de nuestros ensayos de pretemporada, por lo que tenemos una gran cantidad de datos de telemetría disponibles para encontrar la configuración correcta”, señaló el brasileño Felipe Massa.
Su compañero, el finlandés Valtteri Bottas, calificó al circuito de divertido.
“Tiene curvas largas y rápidas, además la larga línea derecha de detrás permite adelantar y hace las carreras más interesantes”, explicó.
Más allá de los aficionados de Mercedes y Ferrari, esta tercera carrera del Mundial 2015 se presenta como la oportunidad para el resto de escuderías de luchar por estar arriba, lo que se traduciría en una competición más igualada, lejos de los dominios que han hecho perder interés a la Fórmula 1 en los últimos años.