“Wimbledon es mi gran objetivo este año. Era ya así después de la semifinal del año pasado”, explicó Federer, que en esa instancia cayó ante el canadiense Milos Raonic. Después, una lesión en la rodilla no le permitió jugar el resto de 2016.
“Mi objetivo era entonces llegar a Wimbledon este año en forma. Y hasta ahora ha salido bien”, añadió el campeón de 18 grandes.
En ese sentido, Federer no quiso darle demasiada importancia a la derrota ante Haas y negó que la pausa influyera en el resultado. “Tampoco fue que perdí 2-6 y 2-6”, replicó.
En Halle, que se juega sobre césped, Federer debutará ante el taiwanés Yen-Hsun Lu.
Federer perdió ante Haas en su primer partido desde que el 2 abril alzara el título en Miami.
El suizo, campeón este año en Australia e Indian Wells además de Miami, decidió entonces saltarse toda la gira de arcilla para centrarse en el césped y en Wimbledon, donde buscará un inédito octavo título.