El circuito varios meses parado, la suspensión de Wimbledon, un regreso sin público… Como el resto de la humanidad, el tenis vivió un 2020 para olvidar.
Las expectativas son mejores para el año que comienza, aunque el mundo sigue girando al ritmo que marca la evolución de la pandemia de covid-19. Para empezar, el Abierto de Australia, primer grande del año, se aplazará unas tres semanas y comenzará el 8 de febrero, y los jugadores se someterán a una cuarentena de dos semanas a su llegada a la isla-continente.
Y en estas circunstancias, el trío de leyenda mantiene su particular carrera, con varios jugadores llamando cada vez más fuerte a la puerta; empezando por Dominic Thiem – ganador del US Open- y Daniil Medvedev -logró el Masters- y continuando por Stefanos Tsitsipas y Alexander Zverev.
Roger: La gran incógnita
Federer cumplirá 40 años el 8 de agosto, tras un 2020 casi en blanco debido a dos operaciones y al confinamiento. Lógicamente su rendimiento genera dudas.
“La hora de la retirada se acerca y sé que echaré de menos el circuito. Sería fácil retirarme ahora, pero quiero continuar y darme una oportunidad de seguir disfrutando del tenis”, declaró en julio tras su segunda artroscopia en la rodilla derecha.
A principios de noviembre, el ahora número 5 mundial publicó en las redes sociales una foto con este pie: “Back to work (regreso al trabajo)”. Ya en diciembre reconoció que su puesta a punto iba más lento de lo esperado y que podría incluso no jugar en Australia.
Al hombre que ha ganado todo se le resiste la medalla de oro olímpica en individuales (ganó el dobles con Stan Wawrinka en Pekín-2008). El aplazamiento de Tokio-2020 a 2021 le ofrece una oportunidad en un torneo siempre abierto a las sorpresas, cuando cada vez se antoja más complicado verle levantar un 21º Grand Slam, el maratón de siete partidos a cinco sets.
Rafa: Madurez y adaptación
Adaptación. La madurez de Nadal consiste en saber cómo enfocar su castigado cuerpo y su tenis para seguir ganando, seleccionando con precisión los torneos que juega.
Y lo hace de maravilla, como demostró en el último Roland Garros, disputado en el otoño parisino debido a la pandemia, en condiciones muy diferentes en las habituales -frío, humedad, techo, tenis nocturno y nuevas bolas-, y en el que logró su 13º trofeo, sin ceder un set y barriendo a Djokovic en la final.
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— Rafa Nadal (@RafaelNadal) December 10, 2020
En 2021, el español soplará 35 velas y de nuevo tendrá la vista puesta en los ‘grandes’, lista en la que ya ha igualado el récord de 20 de su amigo Roger y principal ingrediente del debate sobre el mejor de todo los tiempos.
Novak: Dolor y gloria
Número 1 mundial al final del curso por sexto año, igualando el récord de Pete Sampras, Djokovic vivió un 2020 entre el dolor y la gloria.
Volvió a reinar en el último grande anterior al covid-19, el Abierto de Australia, y luego multiplicó las salidas de tono durante la pandemia.
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— Novak Djokovic (@DjokerNole) December 9, 2020
Desde sus alegatos contra la vacunación hasta la organización del ‘Adria Tour’, el torneo benéfico sin normas de distancia social que se convirtió en un brote de la pandemia, el serbio no supo gestionar la excepcionalidad del momento.
Como colofón, su regreso a los grandes escenarios en el US Open, primer Grand Slam posterior al confinamiento, quedó marcado por un enfado durante su partido de octavos ante Pablo Carreño que terminó con un fortísimo pelotazo involuntario a la garganta de una juez de línea. Fue descalificado.
Con sus 17 grandes y su larguísima lista de récords, el serbio continuará siendo la tercera vía, la más impopular, en la pelea por el trono eterno.
Djokovic, el más joven del trío, cumplirá 34 años y cuenta con un físico privilegiado para poder ganar la carrera a sus legendarios colegas.