Ex número uno y cuatro veces campeón en Australia, Federer indicó que echó mucho de menos el circuito en los últimos meses. Su último partido fue a principios de julio de 2016, en las semifinales de Australia.
Extraña ganar
“Uno echa de menos los partidos, la sensación de ganar, de entrar al estadio y el hecho de ver a los demás tenistas”, señaló el suizo de 35 años, actualmente número 17 del ranking mundial. “Hasta cierto punto, el circuito es como la extensión de la familia”.
“Es bonito ver esas caras familiares cada año. Y eso es algo de lo que no pude disfrutar en los últimos seis meses. Probablemente es lo que más eché de menos”.
Federer jugó a principios de enero la Copa Hopman, un torneo de exhibición que sirve a los tenistas de preparación para el primer Grand Slam de la temporada.
“Fue una preparación, ahora veremos si fue perfecta o no”, avisó el helvético, que aseguró que el físico no será un hándicap que juegue en su contra.
“Entrené lo más duro que pude, así que estoy listo. Hice muchas sesiones en las que entrené más de dos horas y media y de tres. Siento que estoy preparado”.
Acostumbrado a ser siempre uno de los primeros cabezas de serie, Federer arrancará Australia como el preclasificado número 17.
“¿Por qué no un cambio?”, dijo sonriendo en Melbourne Park. “Prefiero ser el favorito, pero ir de tapado está bien. Será divertido siempre que desde el punto de vista de la salud pueda jugar cuatro o cinco sets y pueda jugar varios partidos seguidos. Si siento dolor, obviamente no será tan divertido. Así que no importa la preclasificación o el ranking de cada uno”.