La FIA añade la lista de medidas propuestas recientemente a las escuderías de Fórmula 1: “Un tope global de costes, una reducción de costes a través del reglamento técnico y deportivo, una estandarización de las piezas”.
En la última reunión del grupo estratégico de la Fórmula 1, formado por representantes de las seis escuderías más importantes, la FIA, de acuerdo con Formula One Management (FOM, la sociedad de Bernie Ecclestone que gestiona los derechos comerciales de la F1), “propuso el principio de fijación de un precio máximo del motor y de la caja de cambios a los equipos clientes”.
“Estas medidas fueron sometidas a votación y aprobadas por una gran mayoría”, pero “Ferrari decidió oponerse y ejercitar el derecho al veto que tiene desde hace mucho tiempo por los acuerdos registrados en el gobierno de la Fórmula 1”, subrayó la FIA, presidida por Jean Todt, exdirigente de Ferrari.
“En el interés del campeonato, la FIA eligió no responder al derecho de veto de Ferrari. En consecuencia, la FIA iniciará una consulta a todos los actores (de la Fórmula 1) para preguntar por la eventual introducción de un motor cliente que estaría disponible a partir de 2017”, anunció la federación.
“Tras esta consulta, se abrirá una licitación para este futuro motor cliente, cuyo coste será muy inferior al actual”, añadió la FIA, en su intención “de asegurar el desarrollo sostenible del campeonato a largo plazo”.