Sobre la etapa, en la que su equipo tuvo que trabajar para anular la escapada, el madrileño destacó que se rodó a un ritmo elevado, y recordó que el objetivo es tener el maillot amarillo el último día.
“Ha sido una etapa rápida y al final la situación delante era buena. Hemos salvado un día con el objetivo de siempre: preparar el Tour de Francia y tratar de llevar el maillot amarillo el último día”, explicó.