Su cuerpo dijo basta y quien se ha convertido en una leyenda viva del fútbol italiano se retirará cuando termine la temporada de la liga profesional de fútbol en Estados Unidos, que disputa junto al New York City FC.
BBC NEWS MUNDO
El adiós de Andrea Pirlo: se retira el último gran seductor del fútbol italiano
No será fácil reconfortar al balón cuando Andrea Pirlo se despida definitivamente del fútbol este año, como lo anunció el domingo en una entrevista con la Gazzetta dello Sport.
“Uno se da cuenta de que el momento ha llegado. Cada día tienes problemas físicos, no puedes entrenar como quieres porque siempre tienes algo. A mi edad, eso es suficiente. No puedes jugar hasta los 50 años. Haré otra cosa”, reconoció.
Cuando cuelgue las botas, a los 38 años de edad, Pirlo pondrá fin a una brillante carrera en la que ha podido imponer su particular manera de ver y sentir el fútbol, sobreviviendo en un mundo en el que suele predominar el vértigo con el que se mueven sus habitantes.
Fue esa pausa, esa íntima relación que ha tenido con el balón, que lo ha llevado a ser el último de su especie en el calcio italiano.
Porque a la vez de ser considerado un fantasista por la magia en sus pies, su figura ha sido admirada principalmente por ser uno de los mejores registas que ha existido, partiendo desde la elegancia en su trato a la pelota.
La diferencia entre los dos conceptos de jugadores que surgen en Italia se basa en la posición de cada uno en el centro del campo -uno más adelantado a la espalda de los delanteros, el otro más retrasado por delante de la defensa-, si bien ambos cuentan con el balón como su mejor aliado.
Pirlo fue los dos en uno.
Carlo Ancelotti le dio la batuta del último gran Milan que dominó durante la primera década este siglo, ganando dos títulos de la Serie A y dos Champions League.
A eso se suma la Copa del Mundo que ganó junto a Italia en 2006.
Tras 10 años de rossonero, Pirlo se fue con su carta de libertada hacia Turín para fichar por el Juventus, donde sumó otros cuatro squdettos consecutivos y llegó a una final de la Champions, que perdió contra el Barcelona, y a otra de la Eurocopa, en la que cayó ante España.
Precisamente fueron el conjunto azulgrana y la Roja europea los que mejor pudieron entender e interpretar el fútbol que Pirlo lleva por dentro y con el balón en los pies.
Pero ese es un tipo de jugador que pareciera estar en peligro de extinción.
Y al igual que pasó con Xabi Alonso y pasará en un futuro no muy lejano con Xavi Hernández, Pirlo anunció su adiós.
El último gran amante del balón del calcio italiano.