Eimy Nij, integrante de la asociación, aseguró que muchas de las mujeres viven demasiado lejos o por su situación económica no pueden pagar sus pasajes a la capital.
“Tratamos de abrirle oportunidades a esas mujeres que la única fuente de ingresos eran sus esposos, pero que a causa de la violencia los perdieron. Este año hay por lo menos 125 nuevas viudas de pilotos muertos y el objetivo es buscarlas para ofrecerles ayuda”, aseguró.
Nij indicó que actualmente la Universidad de San Carlos las apoya con consultas psicológicas y también reciben víveres de entidades privadas.
Limitantes
Lilian Maribel Pérez, una de las dirigentes de la asociación, explicó que los recursos de la asociación son limitados y por esa razón a veces no buscan a las mujeres que han quedado afectadas psicológica y económicamente.
“Los materiales que utilizaron las viudas en los cursos de Intecap fueron donaciones, nos dieron telas, hilo, y ahora tenemos 40 maquinas de coser, algunas fueron donadas por una entidad canadiense”, destacó Pérez.
Pérez agregó que del 1 al 14 de diciembre tendrán un bazar en el Parque de la Industria, zona 9, donde ofrecerán cortinas, cojines y varios productos que las viudas elaboraron, los fondos serán utilizados para comprar 300 bolsas de útiles escolares para los hijos de las integrantes.
Según la Procuraduría de Derechos Humanos, hasta el 11 de noviembre último se tenía un recuento de 33 pilotos de buses urbanos y extraurbanos ultimados en el país.