Comentó que estos dos sujetos ya habían sido detenidos en otra ocasión, cuando se les sorprendió robando en la escuela de la localidad, a principios del año. “Desconocemos por qué los dejaron salir de la cárcel, si al final no entiendne de seguir afectando a la gente trabajadora”, expresó Perechu.
“Llamamos a la familia para que se den cuenta qué tipo de hijos tienen y fueron ellos mismos quienes los azotaron en repetidas ocasiones, ya no queremos gente que solo venga hacer daño y no genere nada positivo en el cantón”, expuso Perechu.
El líder comunitario agregó que se invitó a niños y adultos a presenciar el castigo para que se den cuenta de que robar es malo y que no deja nada bueno en la vida.
Diego Roché , vecino del cantón El Pitó, solicitó a las fuerzas de seguridad entregar las pruebas necesarias al juez que vayan a estar a cargo del caso, para que “no salgan rápido de presión”.
“El castigo es necesario practicarlo, solo así los delincuentes van a entender que hay comunidades que estamos organizadas y que no vamos a permitir que nos vengan a quitar la paz en la que vivimos. Luego que fueron azotados, los retenidos fueron entregados a los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC)”, informó Roché.
Luego de cuatro horas de dialogar con los pobladores, los detenidos fueron retirados del lugar en un autopatrulla de la PNC y trasladados al juzgado de Paz de Chicacao.