Gómez es originario de San Pedro Sacatepéquez, San Marcos, pero desde hace 14 años se mudó junto a su familia a Mazatenango, en busca de mejores oportunidades laborales.
El joven panadero se despierta cada día a las 4.15 horas para repartir su mercadería en varias colonias de la referida cabecera, donde decenas de padres de familia lo esperan para poder alimentar a sus hijos con los productos que ofrece.
Perseverancia
Gómez empezó a aportar a su familia cuando su padre quedó desempleado, pues para seguir con su educación y la de sus hermanos era necesario que encontrara un oficio y así obtener algo de dinero.
“Desde los 14 años empecé a trabajar y a depender de mí mismo”, relata Abdías, quien recuerda que al principio cargaba en la espalda una caja, en la cual llevaba el pan para ofrecerlo a sus clientes.
Luego de algún tiempo, Gómez consiguió una carreta con la que podía ofrecer más productos a sus clientes, y empezó a soñar con tener un medio de transporte que le facilitara movilizarse, aunque sabía que sería difícil conseguirlo debido a su situación económica.
Abdías recuerda que luego de mucho trabajo y perseverancia pudo conseguir un préstamo para comprar la motocicleta en la que ahora traslada su producto, pues debido a que no trabajaba para una empresa reconocida, ningún negocio le extendía un crédito para obtener el vehículo.
“Desde temprano empiezo a vender el pan, esperando que Dios me ayude, porque de esto dependen mis ganancias y tengo que pagar la moto, entre otros gastos”, detalla Gómez.
Preparación
El sueño de Abdías es graduarse de bachiller en computación este año y empezar una carrera en la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac), donde ya se ha efectuado algunas pruebas de admisión.
“Todos los sábados aparto el día para ir a estudiar. Gracias a Dios estoy cerrando mi carrera este año y ya me fui a hacer las pruebas de admisión en la Usac. Espero que todo me salga bien para seguir superándome”, detalla Gómez.
“A los jóvenes les digo que deben de ser responsables y trabajar duro por sus sueños, siempre con la ayuda de Dios. Tomemos el buen ejemplo de las personas y no de las que nos destruyen”, finalizó el panadero.
Bloqueo causó pérdidas
El joven panadero indicó que debido a que los salubristas le impidieron el paso y le quitaron las llaves de su motocicleta temporalmente, no pudo entregar el producto que llevaba, por lo que tuvo pérdidas económicas que le afectaron seriamente.
“Ese día me tocaba pagar el crédito de la motocicleta y ya no pude por todo el producto que tenía. En un crédito hay que pagar multas y otras cosas, entonces estaba muy enojado”, aseguró Abdías.