La infraestructura, realizada con el apoyo de la cooperación española y representada por el embajador, Alfonso Portabales, requirió una inversión de Q7.1 millones y beneficiará directamente a más de mil 200 personas, además de evitar que se viertan aguas contaminadas al lago de Atitlán.
Morales destacó el esfuerzo realizado este año por su Gobierno, traducido en una reducción de la deuda y una apuesta por la salud y la educación.
“Va a haber recursos” , avanzó el presidente de cara a las inversiones del próximo año.
A diferencia de este 2016, cuando el país se encontró con una importante deuda de arrastre comprometida del anterior ejercicio, en el 2017 el Gobierno contará con mil millones de quetzales para ejecutar iniciativas desde el mes de enero.