La actividad fue coordinada por la comuna de Casillas, la agrupación Guardianes de la Naturaleza y por el monseñor Bernabé Sagastume Lemus, obispo de la Diócesis de Santa Rosa de Lima y presidente de la Comisión Diocesana de Defensa de la Naturaleza (Codidena).
Algunos participantes comentaron que con la siembra de los árboles buscan que las próximas generaciones de sus comunidades gocen de una mejor calidad de oxígeno.
Juan Rodríguez, de Guardianes de la Naturaleza, exhortó para que las personas se involucren en ese tipo de actividades y señaló que los recursos naturales en Guatemala se están perdiendo.
“Es necesaria la reforestación. La Municipalidad nos apoya con 75 mil arbolitos, y estamos luchando para que el próximo año podamos conseguir más, y así continuar con la lucha de proteger nuestros bosques”, manifestó Rodríguez.