El funcionario indicó que con la distribución de insumos para comenzar a sembrar cultivos alternativos se espera beneficiar a unas dos mil 820 familias.
“Se beneficiarán con la dotación de insumos para la implementación de sistemas de riego por bombeo y goteo, cosechadoras de agua de lluvia con sistemas de riego, sistemas de microrriego y dotación de insumos para el acolchado agrícola para mejorar la producción en huertos familiares. Además, se entregarán camiones refrigerados para que se transporten los productos”, explicó.
Méndez Montenegro añadió: “Traemos un plan para que lo que se produzca se venda. Les dará estabilidad e ingresos dignos. Proponemos que como cosecha alternativa se siembre minizanahorias, arveja, ejote francés, ya que la principal será el cultivo del arándano”.
Manifestó que plantean aprovechar el clima de los dos municipios, donde a cualquier hora del día desciende una densa neblina, lo que según expertos puede ser aprovechado para un sistema de riego por goteo, ya que se atrapará la nubosidad y se convertirá en agua.
El proyecto también contempla el otorgamiento de préstamos a través del Fondo Nacional para la Reactivación y Modernización de la Actividad Agropecuaria (Fonagro), para la producción de los productos que no serán reembolsables, como un apoyo para que las familias confíen en la sustitución de los cultivos ilícitos.
El funcionario comentó que la inversión será de Q51.2 millones, que están previstos en el presupuesto del Ministerio de Agricultura (Maga) para el presente año fiscal. La inversión incluye la instalación de un modelo de producción en los municipios afectados por la falta de límites territoriales y que también será implementado en otros departamentos, por su rentabilidad.
Manifestó que para lograr el éxito del proyecto se cuenta con el apoyo de la Gremial de Exportadores no Tradicionales y de la junta directiva de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport) para desarrollar un plan de negocios y garantizan que la cosecha tendrá un mercado seguro.
Los mercados están demandando muchos productos que se podrán sembrar en estos municipios. Si se va a generar la producción, también debe generarse el empaque para que la mano de obra le quede a las familias. Nosotros nos encargaremos de distribuir los productos a los exportadores”.
“Los mercados están demandando muchos productos que se podrán sembrar en estos municipios. Si se va a generar la producción, también debe generarse el empaque para que la mano de obra le quede a las familias. Nosotros nos encargaremos de distribuir los productos a los exportadores”, aseguró Estuardo Castro, de Agexport.
Según Méndez Montenegro, la Agexport será la encargada de identificar clientes potenciales de los productos que las familias de Ixchiguán y Tajumulco cosecharán en los próximos cuatro meses, ya que asegura que en el mercado internacional hay hasta el 90 por ciento de demanda insatisfecha, lo que facilita una gran rentabilidad para sustituir las plantas que sirven de materia prima para producir droga.
Mientras se realiza la preparación de la tierra y empiezan a producir, que estiman sea en los próximos cuatro meses, la próxima semana se iniciará a entregar a cada familia de bolsas de víveres con 30 libras de arroz; 30 libras de frijol, 17 libras de avena mosh, 24 unidades de atol fortificado y 30 libras de harina nixtamalizada.
Sociabilizar
La socialización del proyecto se hizo primero con pobladores de Tuichán, Ixchiguán, quienes aceptaron la sustitución de las plantas; sin embargo, mostraron su preocupación porque no se propone el cultivo de papa, que ha sido, según ellos, una de las mayores costumbres agrícolas.
“Nos preocupa que no mencionen el cultivo de papa porque ha sido una de las mayores producciones de Ixchiguán. Necesitamos que lo temen en cuenta porque se trata de incrementar la capacidad de producción”, enfatizó un vecino.
Eliú Gálvez, poblador de Ixchiguán, solicitó que se intervenga para que los costos de la semilla sean accesibles, porque en la actualidad el precio es elevado para la producción, ya que consideran que no solo es el mercado, sino la producción de semilla y tubérculos.
“Solicitamos que se nos apoye con el ICTA y se produzcan mini tubérculos y que la semilla sea accesible, pues los precios actualmente son elevados para nosotros”, aseguró.
Nos preocupa que no mencionen el cultivo de papa porque ha sido una de las mayores producciones de Ixchiguán. Necesitamos que lo temen en cuenta porque se trata de incrementar la capacidad de producción”.
Después fue presentado el plan a los vecinos de Tajumulco, y aunque fueron recibidos con reclamos por parte del alcalde Ismael Ramos, ya que hasta el momento solo han sido ofrecimientos, al final aceptaron las propuestas que presentó el Maga.
“Esperamos que se comience a ser efectivo y que no se quede en palabras, como lo han hecho con otros proyectos y los agricultores no cuentan con miniriego. Esperamos que el próximo martes empiece a venir la ayuda”, dijo el jefe edil.
Los agricultores de ambos municipios aseguraron a la comitiva que las familias no tuvieron alternativa para la siembra de amapola y que la cosecha no representa mayores ingresos para ellos, más que sostener a la familia y aseguran que confían en que la sustitución de plantas ilícitas les traerá mejores ingresos.
“Los gobiernos no compartieron con nosotros sus conocimientos y tampoco propusieron alternativas como hoy lo están haciendo. La siembra de amapola no nos deja mucho dinero y solo nos sirve para sostener a las familias”, expresó Vidal Pérez, vecino de Tajumulco.
Los alcaldes y líderes comunitarios reconocieron que el plan presentado para la sustitución de plantaciones de amapola debe ser integral, ya que lo más urgente es la recuperación vial porque todo tramo entre esa región y la cabecera ha colapsado y eso no permite que se transporte adecuadamente los productos que cosechan.
Las fuerzas de seguridad han logrado, desde el pasado 19 de mayo, cuando se inició el operativo de erradicación, destruir cinco millones de metros cuadrados de siembra de amapola, equivalente a Q6 mil 637 millones y 34 mil metros cuadrados de marihuana valorados en Q95 millones.
