Las autoridades hallaron al menos cinco casquillos de calibre ignorado, los cuales serán analizados como parte de la investigación.
Lilian Ovando dijo a los autoridades que su primo tenía varios años de vender dulces en los autobuses, pues no logró encontrar otro trabajo y tenía tres hijos. Añadió que él nunca comentó que tuviera problemas con alguien.
Vecinos del lugar exigen a las autoridades gubernamentales que demuestren resultados positivos de las estrategias que supuestamente han puesto en marcha, ya que los ataques continúan, sin importar el lugar o la hora.