Las autoridades investigan si los desconocidos sustrajeron algo del interior del ataúd o si utilizaron los restos para realizar algún rito.
Félix Martínez, encargado del cementerio, comentó que esta mañana hizo un recorrido de rutina, y minutos después encontró tirados restos de block, cemento y otros materiales.
Martínez se acercó y constató que también había una lápida quebrada y un ataúd destruido, por lo que informó a la Policía Municipal, ya que en varias ocasiones han saqueado tumbas.
“Creemos que son pandilleros que operan en este sector. El camposanto se cierra a las 17 horas, pero como hay varios lugares por donde se pueden meter y los delincuentes hacen fechorías”, indicó Martínez.
María González, vecina del lugar, comentó que en las noches se escuchan ruidos extraños en el cementerio, y que al parecer hay un grupo de pandilleros que opera en el sector, por lo que pidió a las autoridades patrullar por el área.
Fiscales del Ministerio Público añadieron que investigarán para establecer si los delincuentes robaron objetivos de valor.