El proyecto fue una iniciativa de la comuna, debido a la extrema pobreza de algunas áreas, por lo que solicitó apoyo de las organizaciones mencionadas con las que se coordina la estrategia para desarrollar un proyecto integral, orientado a mitigar la pobreza, y a proponer soluciones al problema habitacional de ese municipio.
Mejor vivienda
Según los coordinadores del programa, los beneficiarios serán unas 150 familias que residen en estructuras precarias, a las que se apoyará para que cuenten con una vivienda social sostenible con un sistema de mampostería con base en bloques estabilizados, la cual contemplará los estándares necesarios para ser habitable.
La estructura de las viviendas incluirá características para aprovechar las dos estaciones principales del país —temporadas lluviosa y seca—.
Las viviendas están proyectadas con la finalidad de incluir un área de cultivo para consumo de las familias que las habitarán, con un modelo integrador y sostenible para los beneficiarios.
Esfuerzo conjunto
Alfredo Maúl, director creativo de la Asociación G-22, manifestó que el proyecto es un esfuerzo colaborativo de las instituciones mencionadas que se enfocaron en una propuesta innovadora, económica y ecológica específica para el clima de la región, construida con materiales que se encuentran en los alrededores de la localidad.
Detalles
Maúl explicó que cada vivienda tendrá una longitud de 72 metros cuadrados y un costo aproximado de Q70 mil. Tendrán tres dormitorios, cocina, comedor, servicio sanitario y serán construidas de bambú y bloc artesanal.
“Las familias que sean incluidas en el programa no tendrán que pagar el costo total de la vivienda, porque tendrán subsidios del Ministerio de Comunicaciones de Infraestructuras y Vivienda y de la oficina municipal de Vivienda” de Nuevo San Carlos, explicó Maul.
La alcaldesa Estela de Chávez refirió que a las familias que fueron seleccionadas se les hizo un estudio socioeconómico con apoyo de las instituciones que conforman el proyecto y se identificó que en ese municipio hay núcleos familiares que viven en pobreza extrema.
“Solicitamos el apoyo de las entidades y gracias a Dios se logró, y para el próximo año se tiene proyectado construir las viviendas en los terrenos donde viven las familias que llenaron los requisitos y podrán tener un lugar adecuado para vivir”, manifestó Chávez.