Al llegar el presidente los transportistas lo llamaban, pero él los ignoraba; sin embargo, ante la insistencia los saludó.
En su discurso el mandatario dijo que no podía hacer nada por las carreteras de Quiché, por los problemas legales en los que están involucradas algunas empresas que las construirían.
Morales aseveró que la carretera de San Andrés Sajcabajá será la única que se construirá este año en ese departamento.
Después de relatar la historia de la pobreza que vivió en su niñez, entregó herramientas e hilos , seguidamente le colocaron ropa tradicional de Chajul a él y su esposa. Minutos después se reunió con los transportistas en privado.
Inconformes
Después de 15 minutos salió el presidente y dijo a los medios de comunicación que el gobernador daría una solución temporal al problema de las carreteras.
Morales refirió que había atendido a los transportistas por la desesperación que tienen por el mal estado de las carreteras, aunque aseguró que “no se puede reunir con todos los grupos que se lo piden”.
Delfino Natareno, presidente de la gremial, dijo que el mandatario demostró gran incapacidad, porque al final lo único que hizo fue coordinar con el gobernador, para que él pague el combustible de las maquinas que van a darle mantenimiento temporal a las carreteras.
“Si quieren realicen manifestaciones de todos modos me haré el loco porque no puedo hacer nada”, dijo Natareno, al referirse a lo que habría dicho el mandatario durante la reunión.