En Santa Cruz del Quiché, representantes de la Comisión Departamental de Discapacidad (Codedis) plantearon las necesidades que no han sido abordadas para que los más de 150 mil quichelenses que viven con discapacidad puedan insertarse a la vida económica y productiva del país.
La coordinadora de la Codedis, Marlin de Gil, explicó que según datos, en Quiché la discapacidad también se registra por consecuencia del conflicto armado interno e hipótesis que orientan a que el consumo de ciertos alimentos sería también sería el causante.
Útiles a la sociedad
“Las personas con discapacidad requieren apoyo para que aprendan a desenvolverse. No necesitan la lástima o compasión de nadie, sino la oportunidad de demostrar que pueden ser útiles a la sociedad como cualquier otra persona”, manifestó De Gil.
“Uno de los problemas que existen en Quiché es que no se le da continuidad a los niños, niñas y adolescentes que egresan del sexto primaria de la escuela de educación especial y esto es una debilidad, pues nos ha tocado recibir de nuevo a exalumnos que habían cursado satisfactoriamente su enseñanza en nuestro centro”, planteó Valery Mota, directora de un establecimiento educativo y quien participó en el foro “Inclusión de las personas con discapacidad.
Benjamín Couhoj, de la Procuraduría de los Derechos Humanos, dijo en la actividad de Poptún, Petén, que en el sur de ese departamento hay muchas personas que viven con discapacidad.
“Creo que hay obligaciones de las familias, la sociedad y el Estado para no olvidarse de estas personas, hoy realizamos el evento justamente para no dejar pasar inadvertida esta realidad social”, expresó.
Falta participación
Santiago Cab, director de la Asociación Luis Fernando con Capacidades Diferentes, afirmó que las personas con capacidades diferentes están aisladas de la sociedad, por lo que hizo un llamado a ese sector de la población para que se acerquen a esa fundación para buscar ayuda.
Aparte, la Municipalidad de Antigua Guatemala, Sacatepéquez, autorizó la señalización con líneas azules para vehículos de personas con discapacidad; inicialmente fueron autorizadas 20, pero el plan hasta ahora solo ha contemplado ocho y aún no se socializa, aunque el impulsor de la iniciativa ve positivo el avance para la mejor movilidad de este segmento de la población.
Los espacios están marcados con línea azul en puntos cercanos al centro de la ciudad colonial, y pretenden dar facilidad a personas discapacitadas el acceso a los servicios públicos.
José Manuel Mejía, del Consejo Nacional para la Atención de las Personas con Discapacidad, explicó que el proyecto pretende facilitarla estacionamiento y movilidad a pobladores con capacidades diferentes.
Mejía dijo que el proyecto está inconcluso, ya que la comuna autorizó 20 líneas y solo hay pintadas ocho, también contemplaba la implementación de una calcomanía, para que los necesitados la pidieran y colocaran en el vehículo; además de la creación de un marbete especial para que los visitantes necesitados estuvieran identificados y usaran esos espacios.
Proyecto
La alcaldesa de la ciudad colonial, Susana Asencio, dijo que terminan el proceso de recopilación de información para dar promoción, aunque no estimó tiempo. Añadió que el proyecto forma parte de una primera respuesta y gestión para diseñar un plan integral de las banquetas y espacio públicos, para hacer un verdadero acceso universal a la ciudad colonial “La ciudad está protegida, hay que hacer los estudios y un proyecto integral y socializado”, explicó.