Luego de un rastreo, los agentes localizaron el cuerpo del menor, el cual estaba entre matorrales, a pocos metros del inmueble. Estaba amarrado de pies y manos y tenía señales de haber sido estrangulado, señala el informe oficial.
Conocía a victimarios
Ángel Vargas, oficial de la PNC, dijo que manejan la hipótesis de que el niño pudo haber conocido a sus victimarios, por lo que estos optaron por asesinarlo. Agregó que lo criminales se llevaron un televisor, ropa típica y otras pertenencias de la familia.
En el lugar se encontró un teléfono celular, que según la familia, no les pertenece, por lo que creen que uno de los delincuentes lo dejó tirado. Peritos del Ministerio Público (MP) recabaron evidencias en busca de pistas que permitan dar con los responsables del crimen.
No permiten que se lleven el cuerpo
El padre del niño y vecinos que llegaron al lugar no permitieron que los fiscales del MP enviaran el cuerpo al Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Santa Cruz del Quiché, lo que ahora dificulta el avance de la investigación.
La muerte del menor consternó a vecinos, quienes de inmediato se organizaron para buscar a los criminales, por lo que grupos de pobladores se armaron con palos y machetes para patrullar la zona.
Sebastián Morales, vecino de Pachoj, manifestó su preocupación por el crimen, pues asegura que nunca se había visto algo parecido en la comunidad.
Agregó que no permitirán que la delincuencia se apodere del pueblo y se han organizado con otras comunidades para garantizar la seguridad de los vecinos.