Durante la mañana de este viernes no se han reportado otros bloqueos en carreteras, sin embargo pobladores de varios puntos del país siguen manifestando su inconformidad en las redes sociales.
Ahora: #Bloqueo: Maestros de #Joyabaj bloquean Xatinap Quinto, ruta entre #SantaCruzDelQuiché y #Chichicastenango.
— PNC Tránsito (@DTransitoPNC) August 28, 2015
El día que Guatemala le dijo no a Pérez Molina
“¡Guatemala es tu patrón, y Guatemala te despide, Otto Pérez Molina!”, fue una de las principales consignas de una protesta nacional en la que convergieron prácticamente todos los sectores del país, en la Plaza de la Constitución y cabeceras departamentales, y a la cual se sumaron cientos de comercios, al permitirles a sus empleados asistir.
Un objetivo común y un grito unánime unió a todo el país en un movimiento sin precedentes que resonó en todo el mundo: exigir la renuncia del presidente Pérez Molina, quien, ignora el clamor y dijo anoche que no se iba.
Sin embargo, los 22 bloqueos registrados en todo el país, más las muestras de solidaridad en varias partes del mundo, no dejan lugar a dudas al mandatario de que su dimisión unifica sus exigencias.
Universitarios, médicos, campesinos, estudiantes, maestros, religiosos, indígenas, comerciantes, niños, ancianos, familias y hasta policías fueron de los grupos que ayer se hicieron escuchar al llenar la Plaza de la Constitución con la presencia estimada en más de 100 mil personas, sin contar las movilizaciones en provincia.
Cuando se pensaba que las manifestaciones pacíficas comenzaban a disminuir en intensidad, repuntan tras darse a conocer las evidencias del antejuicio contra del presidente, presentadas por el Ministerio Público y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig).
Temprano
A las 6 horas, organizaciones civiles comenzaron a instalar un escenario frente al Palacio Nacional de la Cultura, mientras agentes de la Policía Nacional Civil, con uniforme gris y negro y sin armas de fuego, pero sí con batones, formaron un cordón en la entrada principal del edificio.
Mientras transcurrieron los minutos, varios restaurantes de la 6a. avenida, zona 1, que acostumbran expender desayunos, permanecían cerrados y podían leerse en hojas de papel o pedazos de cartulina avisos de que se unían al paro.
Pequeños grupos avanzaban por la avenida Bolívar en horas de la mañana, con pancartas, banderas nacionales y ruido de cornetas plásticas, con dirección al Centro Histórico.
Otros grupos, en algunos casos de personas a las que les dieron el día libre, se desplazaban también en la Avenida de La Reforma, zona 10 y otras zonas, hacia la zona 1.