La vecina Alicia de Maldonado manifestó que las paredes de algunas viviendas podrían desplomarse, debido a que últimamente ha llovido fuerte y el agua se ha infiltrado en los muros.
“Tenemos que utilizar las calles, pero da miedo caminar porque se pueden desplomar en cualquier momento. También muchos estudiantes corren el riesgo, eso deberían de considerar los dueños porque no han arreglado las paredes y las autoridades tampoco exigen”, señaló.
Pese a que las autoridades municipales autorizaron disminuir los requisitos para que los dueños de las casas dañadas puedan efectuar trabajos de restauración o remodelación, algunos vecinos siguen sin atender los daños.
Silvia Soch, vecina de la 10ª calle de esa zona, dijo que se ven obligados a caminar sobre la calle y ponen en peligro sus vidas, ya que algunos malos pilotos no respetan y circulan con alta velocidad.
“Es necesario que tanto los dueños de las viviendas, la municipalidad y la oficina del Centro Histórico lleguen a un acuerdo porque las casas son un peligro y a simple vista, podrían desplomarse y alguien puede ser muy perjudicado”, indicó.
El alcalde Luis Grijalva solicitó a los vecinos que se acerquen a la oficina del Centro Histórico, para que hagan sus trámites y darles solución a los daños en las viviendas.
“La municipalidad ya dio un paso, pero si no cumplen los vecinos también habría un delito porque luego no podrán decir que es por la cantidad de requisitos que se piden, al contrario, se disminuyó el mismo es factible”, recalcó el jefe edil.