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Celeste Burgos, oficial de la PDH en Quetzaltenango, informó que al entrevistar a los vendedores y consumidores se confirmó el aumento en el costo de productos como el tomate, la cebolla, carnes, legumbres y frutas. Agregó que los lácteos y cereales han mantenido estable el precio.
Andrés Otzoy, agricultor y comerciante de Almolonga, expresó que este año el tomate, la cebolla y la papa han tenido un incremento de Q0.25 a Q0.50 por libra.
Los comerciantes y agricultores priorizan cinco razones por las que fluctúa el precio de estos y otros productos.
El terreno produce menos
Otzoy, quien tiene 30 años de ser agricultor, aseguró que existe una disminución en la capacidad de los terrenos para producir, lo que ha influido en el incremento del precio. “Por ejemplo, hace unos años el terreno producía de 40 a 45 quintales de cebolla por cada cuerda que sembrábamos, pero ahora nos está dando 28 quintales, como que la tierra no quiere producir más”, afirmó.
Cambio en el horario de labores
De acuerdo con los vendedores, los clientes demandan que el producto “sea fresco”, una exigencia que han notificado a sus proveedores, por esta causa los agricultores han modificado horarios de trabajo para cumplir con las exigencias de los consumidores, lo que causa que se les deba pagar un poco más a los agricultores.
“Como agricultores se ha incrementado el esfuerzo, madrugamos mucho. Para los productos como lechuga, rábano y repollo se empieza a trabajar de noche para que la verdura esté fresca. Antes lo hacíamos el día anterior, pero ahora la gente trata de sacar mejor la verdura, entonces a los trabajadores hay que pagarles un poco más, antes ganaban Q75 al día y ahora son Q80 o hasta Q100”, aseguró Otzoy.
Un descanso para los terrenos
De acuerdo con los comerciantes, hay algunos productores que debido a los daños que tiene el terreno dejan de producir un tiempo ciertos vegetales, o lo dejan descansar y suspenden la producción, lo que disminuye la oferta e influye en el incremento de precio de ciertos productos.
“Con tanta siembra y lo mismo siempre, se daña el terreno, algunos dejan descansar el lugar por un año o seis meses y cuando esto sucede la verdura se pone carísima, después, cuando todos siembran de nuevo, disminuye bastante el precio, muchas personas piensan que solo por una festividad sube el precio, pero no es solo eso, a veces hay varias cosechas y otras no”, afirmó Francisca Macario, agricultora y vendedora.
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Traen los productos de otros departamentos
De acuerdo con vendedores de Xela, durante la época seca disminuye la producción de hortalizas y vegetales en el Valle de Palajunoj, área rural de la cabecera de Quetzaltenango, lo que causa que compren productos de otros departamentos y se incremente el precio.
“Todas las hortalizas las compramos de Almolonga, hay productos que generalmente les compramos a los del Valle de Palajunoj, pero como ahora no tienen, entonces tenemos que comprar de otros productores del oriente de Guatemala, sobre todo tomate y güisquil, no tienen agua en el Valle y eso afecta la agricultura, porque no producen lo suficiente”, dijo Macario.
Incremento en la población
De acuerdo con los productores y comerciantes, el incremento de precio también está relacionado con el aumento de la población. “Nosotros como personas estamos aumentando cada día más y entonces si hay poco producto se pone más caro, claro que se balancea porque cuando hay mucho producto se logra disminuir el precio”, aseguró Otzoy.
De acuerdo con las proyecciones de la población del Área de Salud de Quetzaltenango, en el departamento de Quetzaltenango habitan 940 mil 159 personas, mientras que en el 2014 eran 844 mil 906.
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