Personal de la distribuidora hizo las reparaciones en las salidas de media tensión de la subestación Coatepeque, la cual fue allanada, de forma violenta, por un grupo de encapuchados que manipularon las instalaciones eléctricas.
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Durante esta incursión, estas personas presuntamente del área de Pacayá y armados con escopetas y bombas hechizas, causaron daños importantes en los equipos de distribución, los cuales debieron ser sustituidos.
Desde las 11 horas del lunes 14 de enero, las zonas urbanas y aldeas de Coatepeque, Colomba, Flores Costa Cuca y Génova, Quetzatenango; así como La Reforma y El Quetzal y Nuevo Progreso, San Marcos, no tenía energía.
Temen otra invasión
Maynor Amézquita, portavoz de Energuate, dijo que la situación en el área es tensa, pues se teme que el grupo actúe de nuevo e invada la subestación, por lo que hace un llamado a las autoridades locales para que garanticen la seguridad.
Señaló que ese problema se debe a que el año pasado suspendieron el servicio a unos dos mil 500 usuarios del área del Pacayá, debido a que estos tenían conexiones ilegales.
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Además, explicó que no ha sido posible entablar un diálogo, ya que los pobladores del área se niegan a tener acercamientos con las autoridades y la empresa.
Amézquita dijo que el servicio en las áreas afectadas por los daños en la subestación es normal, por lo que hace un llamado a los inconformes para que no le causen más daños, pues estos repercuten en el resto de comunidades.
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