El proyecto llamado Morazán, nació como una iniciativa de la Unah y posteriormente se involucraron el Cunoc, la UCR y la Asociación Centroamericana de Aeronáutica y Espacio (Acae), organización que promovió la colaboración conjunta de las universidades y que acompaña y gestiona el proceso.
“Carlos Enrique Alvarado, presidente de la Acae, promovió que nos uniéramos como centroamericanos en esta parte académica, así que las tres universidades hicimos una alianza estratégica, el proyecto lo lidera la universidad de Honduras”, indicó el director.
Los involucrados presentaron el proyecto a la Organización de Naciones Unidas (ONU) con la finalidad de que, al ser elegidos, la organización financie el proyecto. “A finales de abril se espera tener una respuesta, ya que compiten otros proyectos a nivel mundial, pero esperamos que nos presten atención. El lanzamiento del satélite estaría programado para el 2021”, explicó.
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Hernández Monzón agregó que tienen una alianza con una universidad de Japón que les daría acompañamiento para “iniciar desde cero” ya que “no tenemos mucho conocimiento”.
El proyecto Morazán está enfocado en el monitoreo y prevención de desastres naturales en Centroamérica. “Lo que queremos es abrir el campo de los satélites y darles un nueva oferta académica a los estudiantes, se intenta que esta formación sea replicada a todo nivel y que todos los estudiantes puedan optar al conocimiento que se va a generar, el poder diseñar un satélite no es algo que cualquiera hace, se requiere de conocimientos técnicos y científicos”, aseguró del director de la división.
Formación en otros países
De acuerdo con la división de Ingeniería del Cunoc al menos 40 de sus alumnos han recibido una beca para estudiar en el extranjero, lo que les ha permitido fortalecer los procesos académicos sobre todo en el caso de Ingeniería Mecánica y Civil.
“Los estudiantes han tenido participación internacional lo que se contagia y motiva. En el caso de Ingeniería hay estudiantes que han hecho pasantías por un año y otros han estudiado maestrías y doctorados en el extranjero, eso potencializa porque en el caso del Cunoc ellos regresan con la inquietud de colaborar con el desarrollo del país, es muy sano académicamente y se transmiten experiencias que motivan a otros a hacerlo. Los que han salido no han sido egoístas”, dijo el director.
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