La condena fue dictada este jueves en el Tribunal Primero de Sentencia Penal de Quetzaltenango, donde autoridades determinaron que Maldonado es responsable de la muerte de Luis Ordóñez, piloto de un bus del transporte público, y de su ayudante Edy Cruz Yac.
El doble crimen fue el 23 de junio de 2015 en la 7a. calle y 14 avenida de la zona 3 de Xela. Según las investigaciones, Maldonado conducía una motocicleta y era acompañado por un adolescente, quien disparó contra las víctimas.
El bus cubría la ruta entre Xela y Cantel. El ataque se registró cuando la unidad detuvo la marcha en un semáforo.
En el mismo proceso, las pruebas presentadas por la Fiscalía comprobaron que Zoida Liseth Jiménez Villatoro y Violeta Iris Monterroso son responsables de extorsión en forma continuada, por lo que fueron condenadas a ocho años de prisión.
Extorsión
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En el mismo juicio, Sergio Hernández, Ariel García y Lidia Geraldina Barillas Gómez pasarán seis años en la cárcel por extorsión. Según autoridades, los tres extorsionaban a la empresa a la que pertenecía el bus en el que trabajaban las víctimas.
De acuerdo con la investigación del MP, los condenados son parte de una estructura criminal denominada “Crazy Gangster”, dedicada a extorsionar a transportistas que cubren rutas de Quetzaltenango a Almolonga, Cantel y Zunil.
Las víctimas depositarían desde el 2013 pagos de Q9 mil para no ser afectados con las amenazas de los extorsionistas.
El juez Moisés de León indicó que se le da valor probatorio a la declaración del investigador asignado al caso y a las pruebas recabadas, entre estas, imágenes de cámaras de seguridad ubicadas en el lugar y los documentos que prueban los depósitos que las víctimas efectuaron.
Investigadores indicaron que el grupo criminal encargado de extorsionar a las víctimas de este caso estaría conformado por 16 personas, de las cuales actualmente solo han sido condenadas seis.
Condenas anteriores
Maldonado ya tiene otras dos condenas por asesinato en grado de tentativa y asesinato. En la primera fue condenado a 16 años por la muerte de un piloto del transporte urbano en La Esperanza, Quetzaltenango.
En el segundo caso fue condenado a 30 años por la muerte de un piloto de 16 años en el referido municipio.
