Este miércoles comenzó en el Tribunal Segundo de Sentencia Penal de Quetzaltenango el juicio contra dos sindicados de haber agredido y robado las cámaras fotográficas a dos periodistas, durante unos disturbios en Xela.
Los procesados son Kennedy Jonatan Ordóñez Coyoy y Francisco Flavio Ixcoteyac López, quienes según la acusación del Ministerio Publico (MP), habrían agredido a los periodistas Carlos Ventura, corresponsal de Prensa Libre, y al colaborador de Nuestro Diario, Byron Bravo.
Bravo y Ventura narraron ante la juez Perla Nowell, cómo sucedieron los hechos la mañana del 24 de julio del año pasado, cuando fueron agredidos durante un enfrentamiento entre autoridades y comerciantes que se oponían el decomiso de mercadería de contrabando.
En esa ocasión, Ventura sufrió una herida en la cabeza, por lo que fue trasladado al Hospital Regional de Occidente para su recuperación. Los vendedores también agredieron a Byron Bravo y lo rociaron con gasolina. A ambos les fue robado su equipo fotográfico.
Este miércoles, la fiscalía presentó la acusación contra los dos sindicados; mientras, que los abogados defensores expusieron sus argumentos. Según el referido tribunal, el juicio continuará este jueves.
Otros casos en el 2015
El 11 de julio del 2015, guardias privados de una empresa generadora de energía eléctrica retuvieron por algunas horas a varios periodistas de distintos medios de comunicación, entre ellos, Carlos Paredes corresponsal de Prensa Libre en Escuintla.
Los comunicadores se encontraban haciendo fotos del desfogue de uno de los drenajes de la empresa que van a dar al cauce de un río cuando fueron interceptados por guardias, quienes exigieron que fueran consignados por invasión.
El corresponsal de Prensa Libre en Petén, Rigoberto Escobar, fue perseguido el 27 de junio de ese año por sujetos que se conducían un picop cuando efectuaba su trabajo de reportero en las cercanías de una empresa en Sayaxché.
Escobar relató que cuando tomaba fotografías para un trabajo encargado por la Redacción de este matutino, un picop se detuvo cerca del lugar donde él se hallaba y cuando se retiró fue perseguido por el vehículo durante unos cinco minutos.