Érica Sarc, registradora civil en fuinciones del Renap en Coatepeque, relató que los gastos de construcción de la obra fueron sufragados por la propietaria del edificio donde funciona la sede gubernamental, como una obra para beneficio de los vecinos.
Iniciativa
“Mi hija mayor tuvo un accidente y quedó con lesiones en la columna, por lo que tuvo que utilizar silla de ruedas. Cuando la trasladábamos a diferentes entidades, nos encontramos con la situación de que no hay rampas para personas con capacidades diferentes, ni en instituciones públicas ni privadas. De ahí salió la iniciativa. El costo de la rampa lo cubrió la dueña del inmueble”, dijo Sarc.
“Mi hija quería dejar algo positivo de lo malo que le sucedió. Muchos usuarios han dicho que la obra es municipal y no es así”, detalló Sarc, quien agregó que la rampa ya ha sido utilizada por otras personas que han llegado a efectuar trámites a la sede del Renap.
“Yo espero que este tipo de iniciativas se vea como un ejemplo a seguir. En Coatepeque no hay accesos para personas con capacidades diferentes en los edificios públicos y ellas merecen ser tratadas por igual”, finalizó.
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Instalan pasamanos
Patricia Guzmán, propietaria del edificio donde funciona el Renap, dijo que además de la rampa se habilitará un pasamanos para facilitarle el acceso a las personas.
Guzmán detalló el motivo de la construcción: “Mi mamá y yo pensamos en hacer la obra para ayudar a la comunidad, a las personas con capacidades diferentes o a las de tercera edad que van a hacer sus trámites al Renap”, dijo.
“Con mi madre estamos al tanto de los servicios que se tienen en nuestro edificio, para que las personas que lo visitan estén cómodas”, dijo Guzmán, quien añadió que ha visto las publicaciones y críticas en redes sociales y que no está de acuerdo, pues la intención de la construcción fue ayudar.
“Nosotros hacemos todo lo posible para que el edificio tenga los medios posibles para atender mejor a las personas. Sé que como propietarios del edificio no tenemos la obligación de hacerlo, pero como ciudadanos, pienso que sí. Lo hicimos con todo gusto”, añadió.
Permisos
Enrique Escobar, de la oficina de Relaciones Públicas de la Municipalidad de Coatepeque, dijo que el papel de la Comuna fue solo el de brindar los permisos para la construcción de la obra.
“La Municipalidad lo que hizo fue habilitar el permiso en el Juzgado de Asuntos Municipales para poder romper la acera y habilitar la rampa. El acto protocolario lo organizó el Renap, al cual asistió el secretario Alfonso Pasos, ya que el alcalde estaba en la capital”, indicó.
“La Municipalidad no incurrió en ningún gasto. La rampa será de mucha utilidad para personas con capacidades especiales. La Municipalidad no es la encargada de ver estos asuntos, pero cuando se puede apoyar, se hace”, añadió Escobar.
Así fue la inauguración
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