Agregó que de estos, 560 casos se reportan en el área central —San Benito y Flores— y 38 confirmados por el Laboratorio Nacional de Epidemiología, sin contabilizar los que se detectan en centros médicos privados.
Flores expresó que para evitar que este mal se propague, personal de vectores efectúa labores de abate, con especial enfoque en barrios vulnerables, donde destruye criaderos por acumulación de agua.
José Baldizón Torres, de la Sección de Vectores de San Benito, citó que al detectar un caso de inmediato se atiende, a pesar de que en las bodegas solo cuentan con un costal de abate, no tienen combustible ni insecticida para tareas de fumigación.
Rodrigo Pinto, director del Área de Salud de Santa Rosa, indicó: “Unimos fuerzas con el Centro de Operaciones y Emergencias (COE) porque el Programa de Vectores no se da abasto para prevenir y controlar esas enfermedades, pues van dos mil 709 casos de chikungunya y 650 de dengue, en lo que va del año”.
Adelso Salazar, gobernador, explicó: “Es alarmante la situación que se vive respecto del dengue y chikungunya, por lo que solicitamos apoyo del COE”. Refirió que por eso se declaró alerta amarilla.
“Las próximas dos semanas trabajaremos en un plan de prevención para evitar que estas enfermedades sigan propagándose, pues tenemos entendido que es más económico prevenir que después curar”, refirió.
Joel Sarceño, del Programa de Vectores, mencionó que con más casos se hallan Nueva Santa Rosa y Barberena, principalmente en el barrio El Cerrito de la Cruz y El Cerinal.
Según estadísticas del Área de Salud de Escuintla, de enero al 25 de agosto de este año se han reportado 621 casos de dengue clínico, 40 con manifestaciones hemorrágicas, nueve confirmados hemorrágicos y tres fallecidos, mientras que en el mismo período del 2014 se reportaron 571 casos clínicos, 33 con manifestaciones hemorrágicas, uno confirmado hemorrágico y un fallecido.
Lea la nota completa en la edición impresa de Prensa Libre, o adquiérala aquí.