De acuerdo con Niz, su familia es de escasos recursos, pero gracias al esfuerzo de sus padres se graduó en el 2014 de Perito en Administración de Empresas, pues no logró estudiar arte, como siempre quiso, debido a la falta de oportunidades.
Detallista
La exactitud con la que Niz retrata a las personas ha hecho que gane aceptación, por lo que hace más de un año instaló un pequeño taller en su casa, situada en la calzada Juan José Bonilla, zona 2 de Jalapa.
“Me gusta ser perfeccionista, por lo que trato que cada uno de mis retratos incluya los detalles de la imagen original”, refiere Niz.
Añade que se adapta a las exigencias de sus clientes y que puede hacer retratos de diferente tamaño, los cuales vende entre Q250 y Q1 mil, según la dificultad de la imagen.
El joven jalapaneco sueña con estudiar Diseño Gráfico, perfeccionar sus técnicas para incursionar en la pintura en óleo y luego fundar una academia de arte, en la que se atienda a niños de escasos recursos del departamento; sin embargo, está consciente de que, para lograrlo, se requiere del apoyo de las autoridades locales y del gobierno central.