El secretario adjunto del sindicato, Rigoberto Hernández, explicó que en cuotas al IGSS la deuda asciende a Q500 mil, lo cual ha causado que esa institución no los atienda, no brinde atención a sus familiares y no les cubra los días de suspensión por enfermedad.
Añadió que el patrono no cumple con el pacto colectivo firmado hace tres años. “Nos amenazan con que si no hay producción, no hay pago”, comentó Hernández.
La empleada Magdalena Ochoa aseguró que se viola el derecho de 208 trabajadores y que de no cumplirse el pacto, no reanudarán labores.
“El IGSS debe demandar a los patronos, porque a sus empleados les descuentan las cuotas puntualmente”, dijo Gerson Castañeda, secretario general del sindicato.
Sonia Palencia, gobernadora de Izabal, dijo que conformará una mesa de diálogo con los empleados, encargado de la finca y las instancias correspondientes para plantear una solución al problema.
Prensa Libre buscó al administrador de la finca, Juan Dardón Meza, pero indicó que no tenía tiempo para hablar con la prensa.