Desde el Miércoles Santo, los actores comienzan la representación de las escenas bíblicas, basadas en el texto del Mártir del Gólgota, el cual se ha adaptado para utilizar las plazas y las calles de este pintoresco municipio, ubicado a 170km de la capital.
Alexánder Mérida, quien personifica a Jesucristo, afirmó que durante siete años ha sido una experiencia que ha fortalecido su fe, la entrega en cada paso con la cruz a cuestas, es una penitencia que cada año dedica a los enfermos y personas que necesitan ser ayudadas por diversos problemas que enfrentan.
Agregó que esta representación es una forma de manifestación de fe, pues cada uno de los integrantes del CEC durante más de medio siglo ha sacado lágrimas a los visitantes, que la prefieren por la realidad con la que se lleva a cabo.
Julio Mérida, presidente del CEC, afirma que son 86 los actores que tienen participación en este evento; sin embargo, hay otros artistas en la música, efectos, pintura, maquillistas que se unen al grupo.
“Para nosotros es un orgullo poder representar la vida pasión y muerte de Jesucristo, es un patrimonio de nuestro pueblo”, aseguró.
Explicó que en la obra se escenifican desde el sueño de Claudia, que llega ante Poncio Pilato para anunciar la captura de Jesús y la forma en la que recibirá muerte. Luego la sentencia, el viacrucis por las principales calles del pueblo, el acto de Samuel Belibet que le niega agua y finalmente la tercera caída previo al acto de crucifixión.