Martínez dijo que según los pasajeros, al pasar por el kilómetro 267 el piloto perdió el control del autobús, se salió de la carretera en una curva y la unidad cayó en una hondonada de varios metros de profundidad.
“El producto de don Federico quedó esparcido a orillas de la cinta asfáltica, el bus arrancó dos árboles en la pendiente, antes de quedar con las llantas hacia arriba en el fondo del barranco”, expresó el socorrista.
Velocidad
Wendy López, pasajera, relató que en varias ocasiones le gritaron al chofer que disminuyera la velocidad, pero este no les escuchó, por el contrario, hablaba por celular desde que el bus salió de la terminal, incluso antes del accidente casi colisiona con un camión y una motocicleta en el lugar conocido como Las Vegas.
“Fue irresponsabilidad del piloto que manejaba a alta velocidad y aunque algunos trataron de bajarse del bus no lo permitió. Fue un mal momento, creímos que todos íbamos a morir”, refirió López.
Ramiro de León Pérez, otro de los pasajeros, comentó: “Me dirigía a mi casa en Chacaj, Nentón, al abordar la unidad me dormí y fue hasta que el bus se movió de un lado a otro que desperté, en ese instante me percaté que nos ibamos a accidentar y todos gritaban ayuda, ayuda. Gracias a Dios no morimos”.
De León manifestó que no hay ningún tipo de control de las autoridades, pues es común que los choferes hablen por celular mientras conducen y los pasajeros somos las víctimas.
Agentes de la Policía Nacional Civil informaron que la causa del accidente fue el exceso de velocidad, además confirmaron que el piloto hablaba por celular, por lo que esperan localizarlo ya que huyó.