Practicar el boliche en un ambiente inclusivo ha beneficiado a ambas atletas, quienes aseguran que son mejores amigas y se complementan al cien por ciento como deportistas, lo que demostraron durante la eliminatoria que se sostuvo en las pistas de la Federación Nacional, zona 15 capitalina.
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Éricka ganó el primer lugar de la rama femenina en la categoría de mayor habilidad, por lo que es parte, junto a Sofía, de la delegación guatemalteca clasificada a los Juegos Mundiales de Verano, formada por 25 atletas de 10 disciplinas deportivas —boliche, atletismo, bádminton, ecuestres, gimnasia rítmica, golf, levantamiento de potencia, natación, tenis de campo y triatlón—. La delegación la completan un jefe y un subjefe de misión, un entrenador por cada disciplina, un médico y una persona de apoyo.
El objetivo
Convertirse en atleta unificada ha sido toda una “experiencia de vida” para Sofía, quien asegura que compartir con los deportistas de Olimpiadas Especiales la ha llenado de satisfacciones y mucha alegría, pues se dio cuenta de que las personas con discapacidad intelectual “son increíbles y pueden lograr lo que se proponen”.
En el 2016, “mi entrenador Edwin Luna me contó lo que se hacía como atleta unificado en Olimpiadas Especiales. Hubo convivencias y me empecé a involucrar como voluntaria y luego en las competencias de categoría unificada, hasta que me eligieron para los Juegos Latinoamericanos de Olimpiadas Especiales de Panamá 2017 e hice equipo con Éricka”, comenta.
Próxima a cumplir 15 años, la joven bolichista afirma: “Éricka es una gran amiga para mí. No la siento diferente y trato de apoyarla en lo que pueda. Admiro su alegría y sus ganas de mejorar siempre”.
Sofía asegura que quiere promover la igualdad y la inclusión a través del deporte. Como voluntaria, “quiero seguir ayudando, no quiero solo quedarme como atleta unificada; hay mucho que hacer”, refiere.
Falta de fondos
Todos los atletas cumplen con un proceso deportivo en el que se garantiza la igualdad de preparación y competencia. Al menos durante un año se llevan a cabo controles y compiten mensualmente antes de participar en los clasificatorios nacionales.
Pero la constancia, disciplina y voluntad de demostrar de lo que son capaces pueden quedar empañadas si no se recaudan los fondos para asistir a los juegos en Abu Dabi. Según información de Olimpiadas Especiales Guatemala, el costo de participación de cada atleta —boleto aéreo, implementación, uniformes, hidratación, alimentación y hospedaje— ronda los Q45 mil, además de otros gastos de viaje, como el pago de equipaje y equipación —raquetas de tenis, bicicleta en el triatlón, palos de golf, bolas de boliche, etcétera—, por lo que buscan toda clase de apoyo, ya sea económico o en especie, que ayude a cumplir con todos los requerimientos.
Es posible patrocinar a uno o varios atletas en forma parcial o total. Cualquier persona o entidad interesada en ayudar puede comunicarse por el teléfono 2361 7916 o a la página web de Olimpiadas Especiales, así como en las redes sociales Facebook, Instagram y Twitter.
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