Este tipo de parque infantil recibió el nombre de B-Happy, que fue construido por la empresa Bridgestone y su distribuidora en el país Llanresa, que además de ofrecer diversión a los infantes también busca promover el reciclaje con una forma creativa e innovadora.
“Estamos felices con la inauguración del parque recreativo. Gracias a las empresas que tienen un alto sentido de responsabilidad social y están comprometidas a contribuir al reciclaje y conservación del medio ambiente”, publicó la Fundación Casa Bernabé, en Facebook.
Para la fundación, la risa y diversión de los niños también son parte importante de la formación de los menores.
“Los parques B-Happy refuerzan nuestro compromiso con el medio ambiente y las comunidades donde operamos, beneficiando a la niñez y la salud de las personas”, informó Erick Herrera, representante de Bridgestone.
Agrega que esta empresa ha construido 36 parques y ha utilizado más de dos mil llantas en toda Centroamérica y el Caribe, a manera de hacer conciencia en las personas de la necesidad de reutilizar las llantas para evitar que se conviertan en criaderos de mosquitos transmisores del dengue, zika o chinkungunya.
Solo en Guatemala se han construido cinco eco-parques, entre ellos el del Hospicio San José, que brinda atención integral a niños y adolescentes con sida y enfermedades comunes; y la Fundación Remar, que entre sus obras sociales tiene un hogar para niños, entre otros.
Labor por la niñez
Casa Bernabé es una fundación no lucrativa y fundamentada en valores y principios bíblicos; tiene compromiso de lograr el desarrollo integra del niño, niña y adolescente que están bajo su responsabilidad.
En Casa Bernabé, según su página web, cada niño tiene un plan de vida de acuerdo con sus necesidades, habilidades y característica únicas, el cual se revisa y afina constantemente para el desarrollo de vida, para acompañarlo en su camino hacia la sanidad y la restauración.
Actualmente cuenta con 125 niños, algunos con situaciones de crisis y riesgos referidos.